Tema 4. Elaboraciones básicas de múltiples aplicaciones: fondos básicos y complementarios. Francis Egea 2020.
Tema 4. Elaboraciones básicas de múltiples aplicaciones: fondos
básicos y complementarios.
Esquema de cada
tema.
·
Objetivos
del tema. Descubre y aprende.
ü Aprender los fondos básicos de
cocina.
ü Aprender los fondos complementarios.
· Reflexionar
en voz alta.
ü ¿Sabes lo que es un fondo básico?
ü ¿Para qué crees que sirve un fondo
básico?
ü ¿Has visto alguna vez hacer un fondo
básico?
ü ¿Has oído hablar de un fondo
complementario?
ü ¿Crees que son útiles los fondos en
la cocina profesional?
·
Desarrollo
del tema por puntos.
Práctico:
Los fondos son, en la cocina, lo que son los cimientos de un
edificio.
El obrero, cocinero no puede presentar un trabajo perfecto si
él no dispone de buenos fondos.
Los fondos constituyen las bases fundamentales de todos los
trabajos en general de la cocina.
Es de recomendar a los chefs que las materias primas a
emplearse sean de primera calidad para que el obrero obtenga en su trabajo un
resultado satisfactorio.
También el obrero debe tener a su disposición la cantidad
necesaria de materias para poder dar cumplimiento a las exigencias, de lo
contrario sería una economía mal interpretada, que al final resultaría un
perjuicio para todos en general.
Los fondos son las preparaciones culinarias,
líquidas, claras, sin ligazón, más o menos concentradas y ligeramente perfumadas,
que se obtienen de cocer en agua dos tipos de ingredientes.
Los
elementos que determinan su nombre:
-
Huesos, jarretes,
recortes y patas para el fondo de ternera.
-
Carcasas,
despojos de ave para el fondo de ave.
-
Espinas de
pescado, recortes de pescados blancos para el fumet.
La guarnición aromática:
-
Mirepoix o
paisana dependiendo el caso (zanahoria, cebolla y puerro, como elementos
esenciales), pudiéndose utilizar y según el caso, tomate, ajo, apio, vinos,
hierbas y especias.
La tendencia actual es realizar el fondo o el fumet
utilizando los huesos o espinas del plato que vamos a realizar; con esto se
consigue mantener el sabor del género principal.
Las salsas dependerán de la calidad de los fondos realizados.
Hoy se tiende a hacer estos lo más gelatinosos posible para evitar así la
utilización de ligazones, puesto que la tendencia de la cocina actual es
elaborar platos más ligeros, con menos grasas y menos ligazones que los de la
cocina tradicional.
Pellaprat.
Fondos de cocina.
Los fondos
de cocina reúnen un gran número de preparaciones. Es evidente que en los
grandes hoteles y restaurantes de fama, la buena cocina les exige fondos
preparados adecuadamente. Las primeras materias deben ser irreprochables. Los
fondos de cocina son el elemento esencial de lasa salsas, gloria tradicional de
la cocina francesa. En realidad son ellos los que le dan importancia. Una
importancia bien conocida, tanto por los profesionales como por los
aficionados, los grandes chefs, las amas de casa, y gastrónomos, lo que nunca
está por demás destacar.
Por razones económicas, en los hogares o pequeños hoteles, a
menudo resulta difícil preparar estos fondos. La mayoría de ellos se pueden
encontrar en los comercios bajo la forma de concentrados.
Los fondos de cocina son de caldo o jugo, grasos o magros, y
se utilizan para rociar las salsas, raguts, asados, etc.
Entre los muchos fondos que existen, por su importancia
tenemos que destacar los siguientes: caldo, consomé, fondo de ave, fondo de
caza, fondo de pescado, fondo blanco claro, fondo rubio claro, fondo blanco o
rubio ligado, fondo rubio ligado y fondo de ternera.
Pero existen todavía otras preparaciones, tales como:
Esencias, fumet, preparados, gelatinas, glaseados variados,
marinadas, duxelles, salmuera, matignon, mirepoix, etc.
El fondo blanco es un caldo sin color, preparado con carnes
blancas, huesos y legumbres aromáticas. Se utiliza para rociar las salsas y
guisados de carne blanca, así como para las aves escalfadas.
El fondo rubio se obtiene con vaca o ternera, huesos y
legumbres aromáticas salteadas ligeramente con grasa o aceite. Sirve para mojar
las salsas rubias, las carnes braseadas y guisados oscuros.
El fondo de pescado se prepara con las espinas y
desperdicios, mojados mitad con vino blanco y agua, aromatizado con cebollas
picadas, perejil, tomillo, laurel, zumo de limón y champiñones. Se destina para
la preparación de salsas especiales para pescados (salsa normanda, salsa vino
blanco) y sirve igualmente para mojar los pescados que se han de brasear o
escalfar.
El fondo magro, utilizado en cocina vegetariana, se prepara
con zanahorias, apio, cebolla, pasados por grasa vegetal, y rociados con agua.
Se aromatiza con perejil, tomillo y laurel.
CLASIFICACIÓN.
1º-
Fondos básicos.
1.1-
Fondo blanco de ternera y ave .
Composición básica:
-
Huesos,
tendones, jarretes, recortes de ternera o carcasas y despojos de ave.
-
Hortalizas
frescas en mirepoix: zanahorias, blanco de puerro, cebollas, apio.
-
Hierbas
aromáticas: Bouquet Garni, clavos, pimienta en grano.
-
Agua fría en
proporción de 4 a 5 veces el volumen de huesos y nervios.
Especificidades:
Para la elaboración de este fondo tendremos en cuenta la
utilización exclusiva de huesos, carcasas y despojos propios del género que
dará nombre propio al caldo.
Los fondos blancos se conservan en cámara a 3º C siendo 6
días lo máximo si estos han sido enfriados rápidamente después de su
elaboración.
Pueden ser congelados a –18º C con una duración de 12 meses
máximo.
Los síntomas de descomposición se manifiestan en el color
ligeramente rosado, espuma en la superficie, sabor acidificado, mal olor, etc.
Al existir dudas sobre su estado se “levanta” y se comprueba.
Fases:
-
Asegurarse de que
los ingredientes sean frescos.
-
Trocear los
huesos o las carcasas.
-
Blanquear los huesos
desde agua fría.
-
Sacar y refrescar
al agua corriente.
-
Colocar en una
marmita limpia, llenar con agua fría y llevar a ebullición.
-
Espumar y
desgrasar.
-
Añadir la
guarnición aromática.
-
Cocer suavemente
de 2 a 3 horas para la ternera y de 45´ a 1 hora para los de ave.
-
Seguir espumando
y desgrasando.
-
Al término de la
cocción pasar por un chino con estameña sin presionar.
-
El fondo debe
quedar limpio y no lechoso.
-
Refrescar
rápidamente.
-
Conservar en
cámara a 3º C.
Resultados:
Debe resultar un fondo transparente, sin grasa y sabroso.
Aplicaciones:
Para la elaboración de salsas como las veloutes, para la
salsa Aurora, Suprema; para el mojado de arroces, potajes, para blanquetas,
legumbres breseadas, elaboración de consomés, etc.
Alternativas:
-
Se puede realizar
de otro tipo de carnes y aves incluso de caza.
-
Se puede restar
algo de agua y sustituirla por vino.
-
Se puede salar un
poco al principio de la cocción.
-
Se pueden
introducir restos crudos gelatinosos como jarretes y patas de ternera para
obtener un fondo más denso y gelatinoso.
Pellaprat:
https://es.wikipedia.org/wiki/Henri-Paul_Pellaprat
Fondo blanco corriente.
Para cinco
litros de fondo: medio kg espalda de ternera; dos kg jarrete de ternera; dos kg
menudillos de ave; 200 g zanahorias; 200 g cebollas; 100 g puerros, un
ramillete grande guarnecido; 100 g apio; 30 g sal; siete litros de agua.
Desosar las
carnes, atarlas, romper los huesos en pequeños trozos y juntarle los menudillos
de ave. Echarlo todo en un puchero con el agua caliente. Ponerlo a hervir,
espumar y añadir las legumbres; sazonar. Cocer tres horas y media a fuego
lento. Desgrasar y pasar por el tamiz.
Blanco de
ave.
Proceder
como para el fondo blanco corriente, pero añadiéndole una gallina mediana
(1,600 kg más o menos) y un kg de menudillos de ave suplementarios.
Bocuse:
https://es.wikipedia.org/wiki/Paul_Bocuse
Jugo o fondo blanco. El fondo blanco se prepara exactamente igual que el fondo
oscuro, exceptuando el dorado al horno de los ingredientes que se realiza para
lograr su coloración.
La transparencia que caracteriza al fondo blanco es lograda
mediante una ebullición lenta y metódica realizada con todo esmero.
Fondo de ave oscuro o blanco. Agregar a las dos preparaciones
anteriormente citadas, bien sea una gallina, bien sea los menudillos de cuatro
aves. Este fondo será blanco si los elementos de los que se compone no han sido
previamente dorados
Escoffier:
https://es.wikipedia.org/wiki/Auguste_Escoffier
Fondo blanco sencillo.
Para obtener
de 5 a 6 litros e fondo blanco, preparar: 6 kilos de jarrete y espalda de
ternera, 200 g de zanahorias, 200 g de cebollas, 60 g de puerros, una ramita de
apio y un ramillete compuesto de una hoja de laurel, unas ramitas de perejil,
un poco de tomillo y dos clavos de especia.
Deshuesar la carne, desmenuzarla, ponerla en una marmita con
los huesos que previamente se habrán triturado, agregando de 6 a 8 litros de
agua y 30 g de sal. Cuando rompa el hervor, espumar cuidadosamente, agregar el
ramillete compuesto y mantener la cocción a fuego lento y regular durante unas
dos horas y media, poco más o menos.
Colarlo por un tamiz fino, poniéndolo en una terrina, donde
se conservará para uso futuro.
Fondo de ave.
Las
proporciones son las mismas que para el fondo blanco sencillo, agregando
simplemente algunos menudillos y caparazones de ave, y una gallina.
Práctico:
Fondo blanco. Desangrar al agua fría huesos de buey,
ternera y recortes. Agregar algunas carcasas de ave. Blanquear, escurrir y
refrescar. Mojar con agua, añadir hierbas aromáticas, legumbres, un paquete de
pimienta en grano y sal. Hervir 3 horas. Pasar.
Fondo blanco de ave. Prepararlo de igual forma que el
fondo blanco ordinario.
1.2-
Fondo oscuro de ternera o aves.
Composición básica:
-
Huesos, tendones,
jarretes, recortes de ternera o carcasas y despojos de ave.
-
Hortalizas
frescas en mirepoix: zanahorias, blanco de puerro, cebollas, tomates y ajo.
-
Hierbas
aromáticas: Bouquet Garni.
-
Agua fría en
proporción de 4 a 5 veces el volumen de huesos y nervios.
Especificidades:
Teniendo en cuenta lo explicado anteriormente, los fondos
deberían elaborarse atendiendo al género que se va a cocinar por lo que
utilizaremos los huesos, carcasas y despojos propios del género a elaborar.
Los fondos oscuros se conservan en cámara a 3º C siendo 6
días lo máximo si estos han sido enfriados rápidamente después de su
elaboración.
Pueden ser congelados a – 18º C con una duración de 12 meses
máximo.
Los síntomas de descomposición se manifiestan en espuma en la
superficie, sabor acidificado, mal olor, etc. Al existir dudas sobre su estado
se “levanta” y se comprueba.
Fases:
-
Asegurarse de que
los ingredientes sean frescos.
-
Trocear los
huesos o las carcasas.
-
Tostar los huesos
en una placa.
-
A 2/3 de la
coloración añadir la zanahoria, la cebolla y el puerro.
-
Terminar de dorar
todo.
-
Colocar en una
marmita limpia, llenar con agua fría.
-
Desglasar la
placa con agua o vino y añadir a la marmita.
-
Llevar a
ebullición.
-
Espumar y
desgrasar.
-
Añadir la
guarnición aromática. Ajos, tomates y bouquet.
-
Cocer suavemente
de 4 a 5 horas para la ternera y de 2 a 3 horas para los de ave.
-
Seguir espumando
y desgrasando.
-
Al término de la
cocción pasar por un chino con estameña sin presionar.
-
El fondo debe
quedar limpio y no lechoso.
-
Refrescar
rápidamente.
-
Conservar en
cámara a 3º C.
Resultados:
Debe resultar un fondo transparente, sin grasa y sabroso. El
color y sabor depende del tostado de los huesos, si éste es excesivo el fondo
saldrá muy oscuro y su sabor será amargo.
Aplicaciones:
Para la elaboración de salsas básicas como la Española, y
numerosas salsas como Madera, Perigord, y también para todas las salsas oscuras
realizadas al momento; a la Pimienta, al Vino, etc. Sirven también para la
elaboración de Glaces y para el mojado de breseados.
Alternativas:
-
Se puede realizar
de otro tipo de carnes y aves incluso para caza.
-
Se puede restar
algo de agua y sustituirla por vino.
-
Se puede sal un
poco al principio de la cocción.
-
Se pueden
introducir restos crudos gelatinosos como jarretes y patas de ternera para
obtener un fondo más denso y gelatinoso.
-
Podremos
incorporar el ajo, el tomate y el bouquet al resto de los ingredientes durante
los cinco últimos minutos que estén estos dentro del horno tostándose.
Pellaprat:
Rubio claro.
Para cinco
litros: dos kg y medio vaca magra; tres kg jarrete de ternera; 800 g huesos de
vaca y ternera, rotos en pequeños trozos; medio kg corteza de tocino
blanqueada; 200 g hueso de jamón blanqueado; 50 g grasa; 250 g zanahorias; 300
g cebollas; un ramillete grande guarnecido; un diente grande ajo; 30 g sal;
ocho litros agua.
Cortar la
carne en trozos grandes. Cortar las zanahorias y cebollas en ruedas. Rehogarlo
todo, incluso los huesos con su grasa. Rociar con medio litro de agua.
Reducirlo. Añadir el resto de agua. Sazonar y dejar hervir a fuego lento
durante ocho horas. Desgrasar y pasar por tamiz.
Rubio de
ternera.
Para cinco
litros: tres kg espalda de ternera; dos kg jarrete de ternera; cinco kg huesos
de ternera; 100 g de grasa; 250 g zanahorias; 200 g cebollas; un ramillete
guarnecido; 20 g de sal; ocho litros fondo blanco.
Atar la
carne, untarla con grasa, sazonarla y dorarla en le horno. Desmenuzar los
huesos. Poner en un puchero las legumbres cortadas en ruedas, añadiendo los
huesos y las carnes doradas. Añadir el ramillete. Cubrirlo de agua y tenerlo a
punto de ebullición durante quince minutos. Rociar con medio litro de fondo
blanco. Reducir, rociar con otro medio litro, reducir una segunda vez. Añadir
el resto del fondo. Dejarlo hervir, espumar, salar y cocer seis horas a fuego
lento. Desgrasar, pasar por el tamiz.
Ligado de
ternera.
Reducir a un
cuarto dos litros de fondo rubio de ternera.
Ligar con 15 g de fécula de patata o maíz, desleída en tres cucharadas de fondo
rubio claro frío. Pasar por el tamiz, guardar al calor.
De ternera
con tomate.
Reducir a la
mitad tres litros de fondo rubio de ternera, junto con tres litros de puré de
tomate concentrado. Pasar por el tamiz.
Concentrado
de ternera (u otras carnes)
Para dos
litros: 250 g recortes de carnes; una zanahoria grande; una cebolla grande
cortada en dados; 10 g de sal; 120 g harina;
tres dl caldo; un dl vino blanco; legumbres aromáticas a gusto.
Rehogarlo
todo. Enharinar y dorar, salteándolo con la espátula. Desglasar con vino
blanco. Reducir y rociar con el caldo. Cocer una hora a fuego lento y
tamizarlo.
Fondo de caza.
Para tres
litros; un kg cabezas y recortes de liebre y corzo; dos kg de huesos de caza en
trozos pequeños; 100 g de puerros; 100 g de zanahorias; 75 g cebollas; 50 g de
apio; 100 g mondas de champiñones; seis bayas de enebro; tres clavos de
especia; una hoja pequeña de laurel; 20 g sal; cinco litros agua.
Asar las
cabezas y recortes de liebre y corzo, y también los huesos de caza. Después de
cocer diez minutos, añadir las legumbres cortadas en dados. Agregar el agua,
las mondas de los champiñones, el enebro, los clavos, el laurel y un poco de
sal. Dejarlo cocer a fuego lento durante dos horas y media o tres horas. Pasar
por el tamiz.
Extractos o
esencias.
Los
extractos se obtienen reduciendo algunos fondos; de caza, de ave, de pescados.
El extracto de trufa se obtienen también por maceración. Son inútiles, sin embargo,
cuando los “fondos” son lo suficiente sabrosos, y no sirven más que para
manjares que han resultado demasiado sosos.
Glasas.
Se llaman glasas a las reducciones progresivas e intensas de
los fondos claros de carne o de caza. Deben reducirse muy lentamente y con
calor en disminución. La glasa está a punto, cuando napa la cuchara sin
resbalar. Las glasas se utilizan para envolver o recubrir ciertos manjares
(chaud-froids de caza, piezas de carne, etc.) con objeto de aumentar su sabor y
darles un hermoso aspecto. Las glasas se emplean también para reforzar una
salsa o una preparación, al igual que los extractos.)
Bocuse:
Jugo o fondo oscuro.
Para esta
preparación, utilizar huesos o carne de ternera: espalda, pierna, cuello, pecho
o ternillas, o sea “carne de tercera”.
Ingredientes para 2 l: un kg de carne de ternera; 250 g de huesos; 100 g de corteza
de tocino fresco; una zanahoria de tamaño mediano; dos cebollas tamaño mediano.
Un bouquet garni compuesto por tallos de perejil, una ramita
de tomillo y un trocito de hoja de laurel; 2 y ½ de agua; una buena pulgarada
de sal, es decir, unos tres g aproximadamente.
Método: poner en una fuente de horno untada con mantequilla o
con manteca, la carne cortada a dados y
los huesos troceados. Poner a dorar a horno caliente. Remover a menudo hasta
que el conjunto haya adquirido un bonito color de asado.
Mientras tanto, poner en una brasera las verduras, cortadas
en rodajas de 4 mm de espesor, las cortezas de tocino y luego, por encima, la
carne y los huesos dorados.
Apartar ligeramente del fuego y dejar durante unos diez
minutos a temperatura suave para provocar la exudación de la humedad de las
verduras. Echar en la fuente de horno un vaso de agua y llevarlo a ebullición
para disolver (desglasar) los jugos caramelizados. Una vez haya finalizado la
exudación de las verduras verter el desglaseado en la brasera y dejar reducir
casi en su totalidad. Repetir dos veces esta última operación, echando
nuevamente agua y teniendo buen cuidado en detener la ebullición en el momento
en que las últimas gotas del líquido que se va espesando, representen al
inclinar la brasera, una cucharada aproximadamente. Este procedimiento recibe
el nombre de “glaseado”.
Finalizar la preparación bañando con los 2 y ½ l de agua y
sazonando con la sal; hacer que el líquido entre lentamente en ebullición.
Espumar, apartar ligeramente la brasera y dejar cocer a fuego muy suave por
espacio de cinco horas por lo menos.
Habrá llegado entonces el momento de pasar el jugo o fondo
por la estameña o un tamiz fino, y de recoger dicho fondo en una cacerola;
dejar reposar durante 15 minutos y eliminar cuidadosamente la grasa, que podrá
ser utilizada en otras diferentes recetas culinarias. Cuando el jugo o fondo,
haya quedado frío, verterlo en otro recipiente colándolo a través de un paño.
Evitar verter el ligero poso que se habrá formado en el fondo de la brasera.
El jugo o fondo obtenido será límpido, suculento, de una
hermosa tonalidad ámbar oscuro.
Escoffier:
Fondos o jugos de ternera oscuros.
Proporciones
para cuatro litros de jugo: 3 kilos de jarrete y espalda de ternera deshuesada,
algunas cortezas de tocino blanqueadas en agua hirviendo durante unos ocho
minutos, 150 g de zanahorias, 200 g de cebollas cortadas en rodajas un poco
gruesas, un ramillete compuesto de ramitas de perejil, una hoja de laurel y un
poco de tomillo. Para remojarlo utilícense 6 litros de fondo blanco.
Cubrir el fondo de una cacerola más ancha que alta con las
cebollas, las zanahorias y las cortezas de tocino, y sobre todo ello colocar la
carne cortada en trozos y los huesos triturados. Mojar con medio litro de fondo
blanco, poner la cacerola en el horno sin taparla y, en cuanto el líquido se
haya consumido totalmente, agregar otro medio litro de fondo blanco. Dejarlo
reducir de nuevo y finalmente agregar el resto de los 6 litros de fondo blanco
y el ramillete compuesto.
Retirar la cacerola del horno, ponerla sobre el fuego y
taparla solamente en sus tres cuartas partes. En cuanto rompa el hervor,
espumar y dejar que hierva a fuego lento durante tres horas.
Colar el caldo por un tamiz fino y guardarlo en reserva para
diferentes usos.
Las carnes que se hayan utilizado para este jugo se pueden
mojar con agua caliente y después de dejarlas hervir lentamente durante dos
horas se cuela el nuevo jugo obtenido, que servirá para humedecer los breseados
o podrá reducirse para preparar gelatina de carne.
Jugo de ternera al arrurruz (arrow-root).
Proporciones
para un litro. Reducir a la mitad 2 litros de jugo de ternera oscuro preparado
según la fórmula más arriba indicada. Desleir 30 g de arrurruz en un poco de
fondo frío, echarlo sobre el fondo hirviendo, dejarlo cocer durante un minuto y
colarlo seguidamente por un tamiz fino.
Práctico:
Fondo oscuro
de ternera. Háganse
dorar al horno huesos de buey y ternera en más cantidad, con legumbres a
“fondo”; escurrir la grasa; echarlo dentro de una marmita, agregando el fondo
mojado con una botella o la cantidad necesaria de vino seco; mojar a nivel con
agua; añadir algunas hierbas y legumbres aromáticas; tomates para darle más
sabor y color. Dejarlo hervir 4 ó 5 horas sin olvidar de espumarlo y
desgrasarlo. Pasarlo a la servilleta. (A este fondo se le puede agregar, para
darle mejor gusto sápido, carcasas de pavo, gallina, pollo, etc.)
Este es el
fondo principal de la cocina moderna, y debido a su importancia el obrero
salsero lo debe de cuidar con mucha atención, para poder hacer frente a las
exigencias de su partida. Ligado con fécula de patatas y perfumado con vino
Jerez o vino bueno seco reemplaza con mucha ventaja a la caduca salsa Española.
En la actualidad está casi olvidada en la mayoría de las cocinas de primer
orden. La española no es más que un fondo oscuro ligado con harina tostada
(roux). El obrero para poderla emplear a su punto necesita hacerla hervir 2
días. Esta operación se hace para poderla condimentar mejor y hacerle perder su
gusto harinoso.
Fondo
Bordalais. Brasear
recortes de carne de buey con una mirepoix de legumbres y algunos cueros de
tocino. Una vez bien dorados agregar una cantidad de harina y dejarla dorar un
poco. Mojar con vino tinto y fondo oscuro; poner tomillo, laurel, apio, unos
tomates y ajos y algunos granos de pimienta aplastada. Cocinar 4 ó 5 horas a
fuego lento. Pasar al colador fino. Reducir a punto. Enfriar y guardar al frío.
Fondo de
caza. Dorar un poco al horno los
pedazos ordinarios, recortes y huesos de caza con hierbas y legumbres
aromáticas, granos de geniève y pimienta en grano. Mojar con vino blanco y
agua. Dejar hervir 5 horas.
1.3-
Consomé blanco.
Especificidades:
Es el caldo de carne (ave, ternera, buey, caza) o de pescado
(se considera siempre de carne si no se especifica), servido generalmente al
principio de las comidas totalmente desgrasado.
Composición básica:
-
Carne, huesos y
nervio sin grasa.
-
Hortalizas:
puerro, zanahoria, apio, rodajas de cebolla tostadas, bouquet garní.
-
Agua.
-
Sal.
Fases:
-
Limpiar y
desgrasar si es necesario la carne y cortar.
-
Cortar los
huesos.
-
Blanquear y lavar
los huesos y la carne.
-
Poner en una
marmita los huesos y la carne, y cubrir con agua, sazonar y cocer.
-
Añadir las
verduras y la cebolla tostada en la plancha una hora después de empezar la
cocción.
-
Espumar y
desgrasar.
-
Dejar cocer
despacio de 3 a 4 horas, espumando de vez en cuando.
-
Agregar dos o
tres veces durante la cocción agua fría y desgrasar inmediatamente.
-
Sacar la carne y
tirar la verdura. Dejar reposar un poco.
-
Volver a
desgrasar.
-
Colar por un
chino con estameña, enfriar rápidamente.
-
Conservar en
cámara a 3º C máximo.
Resultados:
Debe resultar un caldo muy sabroso, no turbio, perfectamente
desgrasado y de color rubio; más claro el de ave, un poco más oscuro el de
ternera o vaca y oscuro el de caza.
Aplicaciones:
Se utiliza principalmente para la elaboración de consomés
clarificados, simples o dobles y para gelatinas; para la realización de
pequeñas marmitas y para potajes claros.
Alternativas:
-
El consomé puede
no ser blanqueado previamente, en ese caso deberá de ser espumado
frecuentemente.
-
Puede elaborarse
en vez de con agua con un fondo de huesos hecho previamente.
Práctico:
Consomés blancos. Huesos de buey y recortes. Mojar con agua, hacer hervir
despacio y espumar bien. Poner poca sal y legumbres aromáticas compuestas de
una cebolla, puerros, zanahorias, una hoja de apio, un poco de laurel y dos o
tres clavos de olor. Hervir 4 ó 5 horas, pasar por el colador y servilleta.
1.4.-
Consomé clarificado, Doble.
Especificidades:
Si hablamos de consomé clarificado es importante entender en
qué consiste la clarificación.
En la clarificación entran en acción materias albuminoides
que a la vez que van coagulando por medio del calor, van por si mismas
atrapando las impurezas que se encuentran suspendidas en un caldo. Las materias
que mejor cumplen esta misión son la clara de huevo y la sangre contenida en
carnes rojas.
Se denomina “doble” porque partimos ya de un consomé blanco y
además en la clarif le añadimos carne picada.
Composición básica:
-
Consomé blanco.
-
Clarif: carne
roja magra picada, claras de huevo, zanahorias, apio, puerro.
-
Hielo o agua
fría.
-
Agua o fondo blanco.
Fases:
-
Cálculo de
ingredientes: como regla general se establecen entre 200 y 300 gr de carne
magra por litro de consomé, 2 claras y 150 gr de hortalizas.
-
Picar la carne no
muy finamente.
-
Lavar, pelar y
cortar las verduras finamente.
-
Preparar las claras.
-
Mezclar la carne,
las claras y las verduras y colocarlas en la marmita.
-
Añadir el consomé
progresivamente, frío y sin nada de grasa.
-
Llevar a
ebullición muy lentamente y remover lentamente con una espátula.
-
Reducir el fuego
cuando empieza a hervir y mantener el hervor muy despacio.
-
No volver a
remover.
-
Asustar: consiste
en romper la ebullición de vez en cuando y seguir hirviendo.
-
Dejar cocer muy
despacio 1 hora más o menos.
-
Colar, mediante
dos chinos, uno dentro de la olla para eliminar mayor cantidad de impurezas y
otro fino recubierto de una estameña que se encargará de retener las pequeñas
impurezas.
-
Desgrasar. Como
cualquier caldo en frío o en caliente mediante cacillo, servilleta o
solidificación de la grasa.
-
Enfriar lo más
rápido posible.
-
Conservar:
refrigeración en temperaturas cercanas a los 0º C entre 5 y 7 días como tiempo
límite.
Como alternativa podremos añadir la clarif al caldo caliente
con mucha precaución. De esta forma conseguiremos que la clarif quede cuajada
de inmediato y nos evitaremos tener que estar moviendo durante mucho tiempo y
no correremos el riesgo de que se nos queme y se nos enturbie el consomé.
Práctico. Lavar las carnes o huesos y las legumbres. Poner a hervir con
agua fría o tibia (nunca con agua muy caliente).
Las legumbres o aromáticos no deben dominar más unos que
otros. Al momento que va a hervir, no abandonarla; espumarla de continuo hasta
su completa depuración, y luego salar un poco.
Resultados:
Debe resultar un caldo muy sabroso, sin nada de grasa y
perfectamente transparente.
Aplicaciones:
Como consomé con sus diferentes nombres, para la realización
de pequeñas marmitas y sopas claras, reforzado con elementos gelatinosos.
Los consomés varían de nombre atendiendo al género con que
están elaborados:
-
De ave: gallinas
y pollos.
-
De vaca, buey o
ternera; carnes, huesos y nervios de estas especies.
-
De caza: faisán,
pato, ciervo, liebre, perdiz o conejo, aromatizado con tomillo, laurel, bayas
de enebro, clavos, etc. De fuerte sabor.
-
De pescado y
mariscos: sería un fumet clarificado.
Para base de consomés que varía de nombre atendiendo a su
guarnición:
-
Profiteroles:
consomé guarnecido con pequeños choux rellenos.
-
Vermicelle:
Guarnición de fideos finos.
-
Consomé Gelèe:
realizado con géneros gelatinosos como el morcillo, morros o patas de vaca,
ternera o ave, servido frío y espeso.
-
Práctico. Gelèe
ordinaria. Preparar un fondo blanco; agregar algunas patas de ternera, rodilla
de buey y ternera. Si este fondo no resulta bastante gelatinoso, añadirle hojas
de cola de pescado blanca, así se podrá obtener una gelatina consistente. Pasar
el fondo después de 4 horas de hervir y clarificarla. El perfume de vino o
licor y la sal se le añadirá una vez clarificada y antes de pasarla. La sal
turba la jalea si se le echa antes de la clarificación.
-
(Para la Gelèe de
ave agregar más ave; para la de caza cargar con recortes de ésta y para la de
pescado hacer un fumet reducido y clarificado.
Práctico:
Consomés clarificados: poner dentro de una marmita una cantidad regular de carne de
buey cortada a la máquina, cuellos, patas, pancetas de gallina, algunas
zanahorias, puerros, dos hojas de apio, todo cortado; dos cebollas partidas,
algo quemadas sobre la plancha y dos o tres hojas de laurel. Agregar: 12 claras
por 20 litros de consomé, mezclar bien con 4 litros de agua o caldo frío; luego
agregar caldo blanco caliente haciendo bien la mezcla. Ponerlo sobre el fuego
moviéndolo de vez en cuando con un batidor o espátula, hasta llegar a punto de
hervir. Retirarlo a un lado del fuego, para dejarlo hervir despacio durante 3 ó
4 horas. Luego pasarlo por una servilleta.
Consomé de caza. El mismo procedimiento que el anterior; adicionar las
carcasas de la caza, pasadas antes por el horno para que tomen un poco de
color.
Pellaprat:
Consomé. Clarificación.
Para dos
litros de consomé; 300 gr vaca magra picada; dos claras de huevo; un puerro;
una zanahoria; perifollo; caldo de la gran marmita o pot-au-feu. Cocción 50
min.
Desgrasar el caldo y dejarlo enfriar. Mezclar en un puchero
la carne picada, las legumbres cortadas finas y las claras de huevo. Agregar el
caldo frío removiéndolo todo. Hacerlo hervir, sin cesar de remover. Dejar cocer
50 min. a fuego lento. Pasar por un tamiz.
Consomé de ave.
Para unos
dos litros de consomé, 300 gr carne de vaca magra picada; una zanahoria y la
parte blanca de un puerro cortados finos; una gallina pequeña ligeramente
dorada en el horno, o tres carcasas de pollos asados; una clara de huevo; tres
litros caldo. Cocción: 50-60 min.
Agregar a la carne picada la clara de huevo, la zanahoria y
el puerro. Añadir el caldo y hacerlo hervir como en la receta anterior y luego
echarle la gallina o las carcasas. Cocer con fuego lento. Pasarlo por el tamiz.
Consomé de caza.
Para dos
litros: 300 gr carne de caza de pelo; dos o tres carcasas de caza de pluma
asada; una brizna de romero; tres bayas de enebro chafadas; algunos recortes de
champiñones; tres litros fondo de caza; dos claras de huevo. Cocción: 50 min.
Proceder como para el consomé de ave.
De pescado.
Para dos
litros de consomé: 500 gr carne de pescado picada (lucio o merluza); 75 gr de
puerros cortados finos; 50 gr rabos de perejil; 100 gr recortes de champiñones;
dos claras de huevo; medio litro de vino blanco; dos litros y medio fumet de
pescado. Cocción: 30 min.
Mezclar el pescado, las claras de huevo, el perejil, los
champiñones y el vino blanco. Agregar el fumet de pescado y mezclarlo todo.
Hacerlo hervir y cocerlo lentamente. Pasar por el tamiz.
Bocuse.
El consomé
está constituido por caldo con muy poca sal y cuyo sabor se incrementa
agregándole una buena cantidad de jugos de carnes, así como condimentos.
Ingredientes para 2 l de consomé:
2 l y ½ de caldo, 650 g de carne de buey totalmente
desprovista de grasa; los menudillos de un pollo; ½ zanahoria; 3 puerros (solo
la parte blanca); una clara de huevo.
Método:
Picar muy menuda la carne y los menudillos; cortar la
zanahoria y los puerros a daditos; echar en una brasera la carne picada , las
hortalizas y la clara de huevo; mezclar bien; bañar con el caldo frío o tibio y
remover con una cuchara de madera.
Poner a hervir a fuego suave, removiendo constantemente. En
cuanto rompa a hervir el caldo, apartar algo la cacerola del fuego y mantener
la ebullición reducida a un ligero estremecimiento por espacio de una hora y ¼.
Al cabo de este tiempo, el caldo ha ido absorbiendo los jugos
de la carne y el aroma de las hortalizas, convirtiéndose de esta suerte en un
consomé.
Colarlo a través de un paño previamente empapado en agua
tibia y luego bien escurrido.
Tras esta última operación, el consomé debe haber quedado
totalmente claro. Esta clarificación se logra gracias a la incorporación de la
clara de huevo y a la albúmina de la carne.
Consomé de ave.
Se
caracteriza por el sabor específico y propio de ave que se obtiene al agregar a
los ingredientes del consomé corriente un pulluela de unos 800 gr
aproximadamente, los menudillos de 2 aves y un caparazón triturado muy menudo.
Proceder exactamente igual que en el caso del consomé.
La polluela se aprovechará para elaborar exquisitos manjares.
Algunos ejemplos de Consomés con nombre propio (P y
B).
Consomé aurora.
P. 50 gr
tapioca; 50 gr puré de tomate; 75 gr juliana de pechuga de ave.
Desleir el puré de tomate en el consomé de tapioca. Agregar
la juliana cuando el consomé esté caliente.
Consomé a la vasca.
Dos
cucharadas de juliana de pimientos; dos cucharadas de tomates en dados; dos
cucharadas de arroz cocido; perifollo.
Agregar estos ingredientes al consomé caliente.
Consomé primaveral.
B.
Zanahorias y nabos sacados de las verduras que han entrado en la composición
del “pot-au-feu”, cortados a bastoncillos de 2 cm de largo y 4 mm de lado, o
moldeados con una cucharita para formar perlas o minúsculas aceitunas
acanaladas; añadir a estas hortalizas, y por partes iguales, guisantes y judías
verdes cortadas a pequeños rombos y cocidos en un poco de caldo. Completar la
preparación con una pulgarada de hojitas de perifollo.
Consomé colbert.
B. Consomé primaveral al que se agrega un huevo pequeño
escalfado por comensal.
P. 100 gr zanahorias; 50 gr nabos; 50 gr guisantes; 75 gr
judías verdes. Cocción: media hora.
Partir las zanahorias y los nabos en pequeños dados, y las
judías cortarlas en rombos. Cocer las legumbres separadamente con agua y sal.
Juntar con el consomé y cocer lentamente diez minutos más. Servir aparte un
huevo esclafado en caldo.
Consomé brunoise.
B. Cortar a
daditos minúsculos 200 gr de zanahorias (no utilizar la parte central); 200 gr
de nabos, 2 puerros (la parte blanca), una ramita de apio. Mezclar todos estos
ingredientes, escaldarlos y escurrirlos.
Poner a cocer a fuego muy suave junto con 2 cucharadas de
caldo en una pequeña sartén.
Echar 2 cucharaditas de “brunoise” en cada taza de consomé.
Se pueden agregar unas hojitas de perifollo.
B. Dos zanahorias grandes; dos nabos; el blanco de un puerro;
medio corazón de apio.
Estofar durante 25 min. en mantequilla. Salar y añadir una
pizca de azúcar. Mojar con un litro de consomé. Dejarlo hervir. Espumar a los
diez minutos de hervir. Espolvorear con perifollo picado.
Consomé Celestine.
B. Ligar muy
ligeramente consomé con tapioca y acompañarlo con crépes sin azucarar y
cortadas en juliana muy fina.
Consomé con diablotines.
Dos dl
bechamel; cayena; 25 gr parmesano; 20 rebanadas de pan estrecho.
Resecar el
pan en el horno, y luego recubrir cada rebanada en cúpula con la pasta que se
obtendrá untando el parmesano con la bechamel y bastante cayena. Poner al horno
para gratinar. Servir parmesano aparte.
A la escocesa.
Cocer cebada
perlada en un consomé de carnero. Como aderezo: brunoise gruesa de zanahorias,
apio y puerros fundidos con mantequilla, judías verdes cortadas en rombos y
dados grandes de carnero.
A la florentina.
Abatir dos
huevos enteros y echarlos en un consomé de ave hirviendo. Agregar dos
cucharadas de arroz cocido y pelusas de perifollo.
Consomé juliana.
P.100 gr de
zanahorias; 50 gr nabos; una cebolla; dos blancos de puerro pequeños; 100 gr
col blanca o lechuga. Cocción: 40 min.
Cortar las
legumbres en juliana fina, y erogarlas 20 ó 25 min. en mantequilla. Ponerle sal
y un poco de azúcar. Se pueden saltear con un poco de grasa de pot-au-feu.
Mojar con el consomé y cocer en ebullición lenta. Espolvorear con perifollo
picado.
Consomé Mimosa.
P. 40 gr
tapioca; 100 gr judías verdes; dos dl royal; un huevo duro.
Consomé de
tapioca ligero aderezado con judías verdes en rombos, royal y claras de huevo
en dados. Espolvorear con yema de huevos duros pasador por el tamiz.
Mosaico.
P. dos
zanahorias; un nabo; 100 gr guisantes; 100 gr judías verdes; una trufa pequeña;
100 gr lengua escarlata; la clara de un huevo duro.
Cocer las
legumbres con caldo y cortarlo todo en dados pequeños. Echar encima el consomé
hirviendo.
Muselina.
P. 100 gr
tapioca; tres yemas de huevo; 100 gr crema fresca. Cocción : diez minutos.
Desleír las
yemas de huevo con la crema espesa muy fresca y echar encima el consomé de
tapioca hirviendo. Servir inmediatamente.
Niçoise.
Tres
tomates; 100 gr judías verdes; 100 gr patatas cocidas; perifollo.
Pelar y
quitar las pepitas del tomate. Cocer las judías y las patatas, y cortarlo en
pequeños dados. Echar el consomé hirviendo encima de estas legumbres y
agregarle perifollo.
Con cebada perlada.
P. 75 gr
cebada perlada. Cocción: dos horas.
Lavarla con
agua tibia y blanquearla a fondo. Lavar de nuevo. Cocer con caldo y echarla en
el consomé hirviendo.
A la parisién.
Consomé de
ave, acompañado con dados de royal y una brunoise de legumbres.
Consomé con Profiteroles.
B.P. un dl
pasta choux; 20 gr parmesano rallado. Cocción: ocho minutos.
Mezclar el
queso a la pasta choux. Formar minúsculos bollitos con la manga y cocerlos con
horno fuerte. Se pueden rellenar con puré de foie gras de ave o legumbres. Se
pueden echar en el consomé en el momento de servir y, si están rellenos,
servirlos aparte.
De cuatro filetes.
P. 25 gr pechuga
de ave cocida; 25 lengua escarlata; 25 gr champiñones cocidos; diez gr de
trufa.
Cortarlo
todo en juliana, y echarle encima un consomé de ave hirviendo.
Consomé a la “royale”.
B.Consomé
ligado muy ligeramente con tapioca y cuya guarnición consiste en un flan sin
endulzar y cortado a trocitos: rombos, daditos y otras figuras cortadas con el
corta pastas.
“royale”
para potajes:
¼ l de
leche, ¼ l de caldo totalmente desengrasado, 4 huevos, una pulgarada de sal,
una pizca de nuez moscada rallada.
Batir los
huevos y pasarlos por el tamiz con el fin de eliminar las galladuras. Agregar
entonces la leche y el caldo calientes pero no hirviendo; verter en un molde
para genovesa o para bizcocho plano y cocer al baño maría como si de un flan se
tratase, teniendo buen cuidado de no dejar hervir el agua del baño, pues ello
propiciaría la aparición de alvéolos en el flan.
Dejar
enfriar el flan, sacarlo del molde y cortarlo en láminas bien iguales y, éstas,
cortarlas a su vez con un corta pastas para formar diferentes figuras. Echar
dicha guarnición en el consomé muy caliente y con mucho cuidado para no quebrar
los motivos decorativos.
P.
Espolvorea un poco de perifollo.
Consomé Xavier.
P. 60 gr
harina; dos huevos; tres cucharadas de leche fresca.
Preparar una
masa con la harina, los nuevos enteros, una pizca de sal, una pizca de
perifollo picado y la leche. Echarlo en un consomé hirviendo al través de un
colador de agujeros bastante grandes. Mezclar bien con el batidor y darle unos
hervores. Servir inmediatamente.
Hochepot (consomé de cola de vaca).
P. un kg
rabo de vaca; 350 gr jarrete de ternera; 400 gr carne magra de vaca; 200 gr
zanahorias; 100 gr nabos; tres puerros; una cebolla grande con un clavo
incrustado; una cebolla asada; una cucharada y media de arrow-root. Cocción:
cinco horas.
Cortar en
trozos bastante delgados el rabo de vaca y el jarrete de ternera. Cocerlo como
para un puchero ordinario, espumar y agregar las legumbres. Cocer lentamente
durante cuatro horas, y retirar las legumbres en cuanto estén cocidas. Colar y
desgrasar el caldo. Picar la carne de vaca cruda en trozos gordos y saltearla
con mantequilla. Espolvorear con arroux-root y echarle el caldo encima. Dejar
cocer una hora lentamente. Desgrasar, pasar por el tamiz y agregar las legumbres
del primer caldo, cortadas menudas, así como el rabo de vaca en dados.
Croûte.au.pot.
B. echar en
el consomé una guarnición hecha a base de zanahoria, nabos y puerros
procedentes del “pot-au-feu”, cortados a trocitos, a los que se dará la forma
de una aceituna, y calentados a fuego suave en un poco de caldo no desangrado.
Servir aparte en un timbal, o en una fuentecita para entremeses, queso Gruyère
rallado, y en otro timbal, o en una fuente cubierta con una servilleta doblada,
cuscurros de pan dorados en el horno.
Se pueden
agregar también pequeños trozos de col, que se habrá cocido previamente en unas
cucharadas de caldo graso.
Consomé frío
B. Por lo
general se sirve el consomé frío en taza, y por supuesto muy frío, aun cuando
esto no signifique helado. Así pues, debe tener la consistencia de una gelatina
muy fluida, es decir, a medio cuajar o con una consistencia de jarabe.
Para
conseguir dicha consistencia, el consomé deberá llevar incorporada una fuerte
proporción de jugos de carne, o bien, por razones de economía, se le deberá
agregar un elemento de ligazón, tal como la tapioca o una fécula.
Sin embargo,
yo desaconsejo la fécula, dado que ésta resta cuando menos una tercera parte
del sabor que nos brindan los diferentes jugos concentrados en el consomé.
Preconizaría más bien la utilización, en pequeñas cantidades, de la tapioca,
que no presenta este inconveniente. Se puede también suplir la insuficiente
concentración de los jugos cárnicos mediante una adjunción discreta de
gelatina, aun cuando insisto en que la tapioca me parece un elemento más
natural, más sabroso, y, por tanto, más aconsejable.
El agregar
tomate crudo en un consomé significa una aportación de 90 % de agua de
vegetación. Con el fin de evitar ese aclaración no deseado del consomé, que
perderá automáticamente buena parte de su sabor, recomiendo se utilicen tomates
previamente cocidos y reducidos a puré.
Consomé a la madrileña.
B. 1.º
método. Escoger 6 hermosos tomates bien maduros, cortarlos por la mitad,
exprimirlos para eliminar el agua de vegetación y pasarlos por un tamiz fino.
Echar ese puré en un l de consomé, agregar una ramita de estragón y un diente
de ajo; ligar con 4 cucharadas de tapioca; poner a cocer a fuego lento por
espacio de 40 minutos. Colar a través de una servilleta y dejar enfriar.
2.º método.
Proceder tal como se ha indicado para el consomé de ave y agregar, por cada l
de consomé, 6 hermosos tomates bien maduros, previamente cocidos y reducidos a
puré. Ligar con 4 cucharadas de tapioca y dejar cocer durante 25 minutos. Colar
a través de una servilleta y dejar enfriar.
Tanto si se
sigue el primer método como el segundo, el consomé debe ser de una claridad
perfecta.
Nota: la
adjunción de una ligazón a base de tapioca no es necesaria si el consomé lleva
incorporada una proporción suficiente de jugos cárnicos y de elementos
gelatinosos naturales.
P.
ingredientes: 300 gr carne de vaca magra picada; 700 gr de tomate; la parte
verde un puerro; 125 gr pimientos encarnados; perifollo; dos claras de huevo.
Cocción: media hora.
Mezclar bien
la carne picada, los puerros y el perifollo, todo ello picado grueso; juntarle
las claras de huevo y 500 gr de tomates picados. Preparar el consomé según la
receta de base. Colarlo y desgrasarlo. Una vez frío, añadirle algunos dados de
tomates crudos, pelados y vaciados y 125 gr de pimientos encarnados cortados en
fina juliana, cocida con mantequilla.
Consomé de ave.
B. En un l
de consomé de ave hirviendo, obtenido siguiendo la receta del consomé, echar
bajo forma de lluvia 4 cucharadas de tapioca, remover y dejar cocer a fuego muy
suave por espacio de 15 minutos.
Pasar por el
tamiz, dejar enfriar y servir en taza.
Consomé de estragón.
P. Hacer una
infusión de consomé caliente con 20 gr de hojas de estragón por litro, y dejar
enfriar.
Consomé al madera, oporto.
P. Los vinos
tales como Madera, Oporto, Marsala o Jerez se añaden en la proporción de un dl
por litro de consomé de ave.
Consomé con trufas.
Cocer
durante 2 minutos en un consomé de ave perlitas o daditos de trufas crudas. En
el momento de servir, aromatizar con vino de Oporto.
NOTA: “El
práctico” nos ofrece un amplio recetario de caldos consumados claros
combinados. Releer a la hora del estudio. Páginas 185-193.
1.5.- Fumet.
Especificidades:
existen dos tipos de fumets: blanco y oscuro. Como elemento base llevará
cabezas y espinas de pescados blancos y como guarnición aromática: blanco de
puerro, cebolla, zanahoria, bouquet garní y pimienta en grano y para la cocción
se utilizará, agua, vino blanco y en ocasiones tinto. Utilizaremos mantequilla
para erogar todos los ingredientes en el caso de hacer un fumé oscuro.
Fases:
-
Limpiar,
trocear y lavar las espinas quitando toda la sangre que pueda tener adherida.
En las cabezas retirar los ojos ya que enturbian el caldo.
-
Limpiar,
pelar y cortar las verduras.
-
Confeccionar
el bouquet garní.
-
Hacer sudar
con un poco de mantequilla la verdura, añadir las espinas y las cabezas y dejar
sudar todo junto. El sudado es optativo, y yo diría que únicamente lo usaremos
para hacer el fumet de color.
-
Añadir el
agua y eventualmente el vino. Poner el bouquet garní.
-
Llevar a
ebullición y dejar cocer lentamente de 20 a 25 minutos.
-
Espumar
frecuentemente a lo largo de la cocción.
-
Añadir los
granos de pimientas machacados al final de la cocción. (optativo).
-
Pasar por el
chino y la estameña. Enfriar rápidamente.
-
Debe hacerse
a diario para evitar conservarlo.
Resultados: la obtención de un buen fumet viene marcada
principalmente por el grado de frescor del pescado. El fumet debe resultar
claro y esto se consigue, con la limpieza del pescado al principio, con una
cocción lenta y sin remover. El exceso de cebolla dará un color amarillento.
Además debemos ser prudentes con el uso de la zanahoria y la hierbas u hojas
aromáticas que utilicemos puesto que también influirán en el aporte de color.
Aplicaciones:
Mojados de platos de pescado, veloutes, para salsas con las de vino blanco,
Nantua, Bercy, etc. Se utiliza también para el pochado de pescados, para la
cocción de caldos cortos, para sopas.....
Alternativas:
Podemos sustituir la cebolla por pies de champiñón bien lavados y pelados si lo
requieren.
El fumet oscuro es una variante que
consiste ene que se tuestan o rehogan tanto las espinas como las hortalizas
hasta el momento en que empiezan a soltar agua. Llegado este punto se flambean
y se añade el agua y el vino tinto. Se utiliza para mojar platos de pescado con
salsas oscuras.
Pellaprat.
De pescado.
Para dos
litros: tres kg de espinas y recortes de varios pescados; 100 g de cebollas
cortadas finas; 200 g de rabos de champiñones; 30 g tallos de perejil; unas
gotas de limón; una brizna de laurel; una brizna de tomillo; diez g sal; dos
litros agua; un litro vino blanco seco.
Ponerlo todo
en un puchero, rociar y sazonar. Dejarlo que hierve, espumar; que siga
hirviendo durante 30 minutos a fuego lento. Pasar por el tamiz.
De pescado al vino tinto.
Proceder
como para el fondo de pescado, pero rociándolo con dos litros de vino tinto y
un litro de agua.
Bocuse.
Fondo de pescado,
llamado “fumet de pescado”.
Conviene utilizar pescados de carne blanca que suelen abundar en el mercado,
tales como merluza, pescadilla, barbadas, etc. Sin embargo, ninguno de estos
pescados es comparable a las espinas del lenguado, que son las únicas con las
que se puede elaborar un auténtico “fumet de pescado”.
El procedimiento es sumamente sencillo. Echar en una cacerola
1 kg de pescado o de espinas de lenguado por un l de agua fría, dos cebollas
grandes cortadas en finas rodajas, una ramita o tallos de perejil, dos
cucharadas de pies de champiñones, el zumo de cuarto de limón, una pulgarada de
sal “ 3 g como máximo”. Serán incorporados los condimentos después de que el
líquido se haya puesto a hervir. No se debe olvidar nunca que el fumet de
pescado es utilizado casi siempre después de reducido, para la puesta a punto
de las salsas o para servir de elemento líquido en el que incorporar
mantequilla o crema de leche fresca en el caso en que a dichos elementos no
puedan ser incorporados como ligazón un roux o yemas de huevo. Esta particularidad
el motivo por el cual no se sazona o se sazona muy poco un fumet de pescado.
Hacer hervir, espumar, agregar los condimentos y dejar cocer a ligero hervor durante 30 min.
Colar a través de un paño. Recoger el
líquido en un cuenco y reservar en lugar fresco.
Práctico.
Cocinar
cabezas y espinas de pescado, espumar bien, añadir hierbas y legumbres
aromáticas, un poco de vino blanco, jugo de limón, sal y pimienta en grano;
hervir 25 minutos. Pasar a la servilleta. Este fumet puede hacerse al vino tinto.
Sirve para las matelotes.
1.6.- Las Glaces.
Especifidades:
las glaces de carne, de ave, de caza o de pescado son los fondos, sin sazonar
que han reducido muy lentamente una parte del agua y se han concentrado así los
jugos. Depende del color que queramos optaremos por fondos claros u oscuros.
Fases
para una glace de carne:
-
Llevar un
fondo oscuro de carne a ebullición y dejar reducir lentamente.
-
Espumar si
es necesario.
-
Según va
reduciendo pasar por la estameña a un recipiente más pequeño y seguir cociendo.
-
Repetir esta
operación hasta que el líquido tenga la consistencia de un sirope, es decir,
que nape la espátula.
-
Volver a
pasar a un barreño de acero inoxidable por la estameña.
-
Enfriar
rápidamente y mantener en la cámara cubierto.
Resultados: será un glasa marrón oscura, densa,
gelatinosa y brillante.
Aplicaciones:
para reforzar salsas y guisos en su sabor y en su color. Para napar ciertos géneros de una capa fina y
brillante, por ejemplo, láminas de trufa, o directamente como salsa mezclada
con mantequilla (Colbert), crema, hierbas..... en las salsas Chateaubriand,
Bercy, Solferino, etc.
Pellaprat.
Glasas.
Se llaman
glasas a las reducciones progresivas e intensas de los fondos claros de carne o
de caza. Deben reducirse muy lentamente y con calor en disminución. La glasa
está a punto, cuando napa la cuchara sin resbalar. Las glasas se utilizan para
envolver o recubrir ciertos manjares (chaud-froids de caza, piezas de carne,
etc.) con objeto de aumentar su sabor y darles un hermoso aspecto. Las glasas
se emplean también para reforzar una salsa o una preparación, al igual que los
extractos.
Práctico.
Glace de
viande. (Extracto de carne). Ella se obtiene por la reducción de un buen fondo
de buey y ternera algo oscuro, o de un caldo muy fuerte, sin sal. Una vez las
carnes bien recocidas, pasar el líquido por un colador fino, y a mitad de la reducción pasar otra vez por la
estameña (tejido especial). A medida que se obtiene la reducción cambiar la
glace en otra cacerola más pequeña y continuar la reducción a fuego muy
moderado; cuidarse a última hora de que no se pegue al fondo de la cacerola.
Está a punto de reducción cuando cubre una cuchara de una capa algo espesa y
brillante.
2º- Fondos complementarios.
Se denominan
fondos complementarios a una serie de artículos de uso más restringido, que
tienen como objeto complementar, facilitar, aderezar y homogeneizar una
elaboración culinaria.
2.1.- Las gelatinas.
Las
gelatinas pueden ser naturales y elaboradas.
Las
gelatinas naturales son las extraídas de alimentos gelatinosos; carnes,
pescados o frutas.
Las
gelatinas de carne se obtienen por la cocción prolongada de carnes gelatinosas
como morros y patas de ternera o vaca, carnes de morcillo y huesos. Se reduce
por evaporación el agua y finalmente se clarifica.
Las
gelatinas de pescados se obtienen de igual manera utilizando pescados
cartilaginosos como el rape, rodaballo, merluza.
Las de
frutas se obtienen por la cocción prolongada en agua y azúcar, especialmente de
la piel y el corazón, al ser estas partes ricas en pectinas. Las frutas con más
pectina son la manzana y el membrillo.
Las
gelatinas elaboradas son aquellas que se elaboran añadiendo gelatina a un fondo
o agua.
La gelatina
más utilizada es la llamada “cola de pescado” que la encontramos tanto en hojas
como en gránulos. Es incolora y no tiene ningún sabor.
Otro tipo de
gelatina artificial es el “Agar-Agar”; resulta de peor calidad al aportar algo
de sabor.
Al utilizar
cualquiera de las antemencionadas haremos un escrupuloso caso a las instrucciones
de gramaje y utilización aportadas por el fabricante, debido a que siempre
varían las cantidades de uno a otro, con la consiguiente pérdida de calidad en
nuestras elaboraciones.
Elaboración
de una gelatina de carne reforzada de forma artificial.
Fases:
-
Poner a
cocer el fondo con la “clarif”.
-
Cuando casi
va a hervir añadir las colas de pescado remojadas y de una en una.
-
Cuando rompe
el hervor “asustar” y volver a dejar hervir muy lentamente (es mejor que el
fuego le de solo a una esquina de la base del recipiente) pero no debe dejar de
hervir.
-
Dejar cocer
repitiendo el “asustado”. No debe hervir a borbotones. Unos 30 minutos.
-
Dejar en
reposo fuera del fuego quince minutos.
-
Colar por
estameña humedecida sin apurar. Rectificar el sazonamiento y el color.
-
Dejar
enfriar para ver el punto.
-
Conservar en
la cámara a 3º C de 8 a 10 días. Si la volvemos a levantar se conservará un
poco más.
Resultados:
Viene
marcado por su transparencia, sabor y consistencia adecuada obtenida por la
dosificación correcta de las colas y empleo de caldos adecuados.
Los colores
van en relación directa con el género empleado:
-
Tonalidad
muy clara para las aves, pescados y frutas.
-
Tonalidad
rubia para vaca, ternera y buey.
-
Tonalidad
oscura para las de caza.
-
Tonalidad
sonrosada para las de mariscos.
Aplicaciones:
En la cocina
fría para abrillantar canapés y piezas frías; para la elaboración de mousses
fríos, timbales, turbantes. Costrones de gelatina o picada para adornar.
Alternativas:
Si las
gelatinas no tienen suficiente color se pueden acentuar añadiendo algún licor.
También se puede cambiar el color añadiendo colores vegetales autorizados o
naturales. (Salsa París, Extracto de remolacha, extracto de espinacas, etc)
Los vinos y
licores, los colores y la sal se añadirán una vez clarificada.
Bocuse.
Se obtiene la gelatina mediante la disolución de las
sustancias gelatinosas que contienen determinadas carnes; jarrete de ternera,
pies de ternera, de cerdo, de buey o cortezas de tocino. También se puede
elaborar dicha gelatina agregando a un fondo de cocina (fondo de ternera, fondo
de ave, caldo, etc.) gelatina en hojas. Esta segunda solución no es muy
aconsejable; se puede echar mano de ella todo lo más en verano, cuando la
temperatura dificulta la elaboración de determinados platos fríos y moldeados
en gelatina.
Ingredientes para un
l de gelatina:
250 g de jarrete de ternera; 250 g de huesos de ternera en
trozos pequeños; 250 g de codillo de buey; un pie de ternera deshuesado y
escaldado; 50 g de cortezas frescas de tocino; un ave de corral o caparazones
de ave (para las gelatinas de ave).
Condimentos: 50 g de zanahoria; 50 g de cebolla; un puerro
(la parte blanca); una ramita de apio; una ramita de tomillo; un trocito de
hoja de laurel; 1 ¼ l de agua; 10 g de sal. Tiempo de cocción: 6 horas.
Método: proceder exactamente igual que para la elaboración de
un fondo de ternera, haciendo tomar algo de color a los ingredientes de
composición, en caso de que se trate de una gelatina dorada, y evitando que
tomen color, cuando la gelatina deba ser blanca.
En el caso de las gelatinas de ave, se impone incorporar a la
composición un ave de corral o caparazones de ave. De hecho, el fondo de
gelatina quedará siempre enriquecido con la adición de aves o de caparazones de
ave.
Conviene comprobar la consistencia de la gelatina antes de
proceder a su clarificación. Verter ½ cucharada de gelatina en un recipiente y
colocar éste en lugar frío. Tras algunos minutos de enfriamiento, se puede
comprobar fácilmente su consistencia. Es entonces cuando se verá si resulta o
no imprescindible agregar un suplemento de gelatina en hojas.
Clasificación de las gelatinas: echar en una brasera de fondo
plano 125 g de carne magra de buey, una pulgarada de estragón y de perifollo,
todo ello toscamente picado.
Agregar una clara de huevo, batir y verter, poco a poco, en
el fondo de gelatina apenas tibio y completamente desengrasado. Esta última
precaución resulta esencial para obtener una gelatina límpida.
Poner a hervir a fuego suave, removiendo continuamente.
En cuanto se produzca el primer hervor, colocar la cacerola a
fuego lento de modo que pueda regularse la ebullición, que deberá ser apenas
perceptible. Cocer de esta forma durante 35 minutos; seguidamente, colar a
través de una servilleta previamente mojada y retorcida.
Por lo general se aromatizan las gelatinas con vinos o con
licores: vinos de Oporto, de Madeira, de Jerez, de Marsala, etc., que se
agregan a la gelatina cuando ésta está tibia y a razón de un dl por l de
gelatina.
Teniendo en
cuenta que al añadir estos vinos se rebajan las propiedades gelatinosas de la
gelatina, éstas deberán ser reforzadas consecuentemente.
Escoffier.
Gelatina de carne.
La mejor
gelatina de carne se obtiene mediante la reducción de fondos oscuros y blancos.
A medida que el jugo se va reduciendo y se produce la
concentración es necesario colarlo a través de una muselina y pasarlo a otras
cazuelas más pequeñas, hasta que llegue al punto de reducción deseado. La
limpidez y pureza de la gelatina
dependen del cuidado con que se hayan espumado los jugos durante el curso de la
concentración.
Al principio la reducción puede hacerse a fuego vivo, pero
hacia el final debe cocer muy suavemente y a fuego moderado.
La gelatina está en su punto en cuanto adquiere una
consistencia de jarabe, hasta tal punto que al sumergir en ella una cuchara la
envuelva en una capa brillante y muy pegajosa, es decir que la cuchara quede
napada con ella.
En cocinas de cierta importancia, después de haber separado
el primer fondo se vuelven a mojar las carnes y los huesos en agua hirviendo en
cantidad suficiente para que queden totalmente cubiertos, y se les da una
ebullición lenta de varias horas.
En esta segunda cocción los huesos sueltan toda su gelatina,
resultado que no puede alcanzarse con la primera operación, y esta gelatina es
la que, mezclada al jugo de las viandas, da la transparencia requerida.
Esta gelatina de carne resulta muy apropiada para completar
ciertas salsas, a las que proporciona una ligereza, un sabor y un refinamiento
indiscutible. Sin embargo, la gelatina debe emplearse con sumo cuidado, sin
abusar y siempre en casos concretos, en los cuales resulta de una utilidad
indiscutible.
Pellaprat.
La gelatina
es un caldo muy cargado de principios gelatinosos. Si para hacer un cocido
hemos utilizado carne o huesos gelatinosos, el caldo cuando se enfría, se
convierte por sí mismo en una gelatina muy ligera. Con elementos especialmente
escogidos, se obtendrá una gelatina sólida.
2.2.- Las ligazones.
Son las preparaciones culinarias simples o elaboradas obtenidas
por productos alimentarios capaces de aglutinar o unir sólidos o dar
consistencia a un líquido.
Se dividen en: ligazones de almidón o fécula: ligazón por
proteínas de origen animal (huevos, mantequilla, la caseína de la leche, la
nata, el plasma de la sangre, el coral de los moluscos y de los crustáceos y
los hígados.
Tienen la propiedad de modificar el sabor y el color de los
alimentos; las ligazones proteicas de origen animal tienen un gran poder
emulsionante, gran retención de agua y a excepción de la caseína de la leche y
de la gelatina, coagulan al calor y aseguran así la cohesión y la estabilidad
de las mezclas.
Las ligazones de huevo, sangre, hígados y coral no deben
hervir nunca porque se coagulan; en contraposición las ligazones en las que el
almidón está presenta deben hervir.
2.2.1. Ligazones con almidón y
féculas.
Las dividimos en dos tipos:
a)
Almidón o fécula diluido en agua, fondo, fumet, vino.
-
Fécula de
patata o maicena.
Fases:
-
Diluir elemento de ligazón en un poco de líquido frío.
-
Añadir poco a poco al líquido en ebullición.
-
Remover para que no se formen grumos y la disolución sea fina.
Aplicaciones:
- Fondo oscuro ligado, jugos ligados
y rectificación de ligazones.
-
Arroz,
tapioca, sémola de trigo o de maíz.
Fases:
-
Añadir en forma de lluvia al líquido hirviendo.
-
Remover con espátula de madera.
Aplicaciones:
-
Bisques de crustáceos, potajes, guarniciones de sopas, ñoquis, polenta,
pudines, etc.
-
Miga de pan y
pan rallado.
Fases:
-
Empapar la miga de pan o el pan rallado en leche o huevo y mezclar.
Aplicaciones:
-
Relleno de cocido, farsas para aves rellenas.
-
Puré de
patatas y de legumbres frescas.
Fases:
-
Las propiedades de la patata y de las legumbres por su gran contenido en
almidón son utilizadas en numerosas aplicaciones. Generalmente la ligazón
vendrá después de la trituración y el tamizado. También puede ocurrir por la
cocción lenta de estos elementos y el constante movimiento del recipiente en el
que se elaboran, provocando un continuo espesamiento al ir evaporándose de
forma progresiva la parte acuosa del preparado.
Aplicaciones:
-
Cremas de patata (Parmentier y derivadas), cremas de legumbres secas (Conti,
San Germain, etc).
b) Ligazones
de almidón mezclado con un cuerpo graso.
-
Mantequilla
manié.
Fases:
-
Mantequilla en pomada mezclada a partes iguales con harina cruda.
-
Incorporación realizada poco a poco y en pequeñas cantidades.
-
Remover con varilla enérgicamente y dejar cocer algunos minutos.
Aplicaciones:
Es un recurso que se utiliza para el
rectificado de la untuosidad de las salsas. Por está razón solo debe de
utilizarse en pequeñas cantidades, ya que de lo contrario correremos el riesgo
de que nuestra salsa tenga un sabor a harina cruda, debido al corto espacio de
tiempo de cocción.
-
Los roux
(blanco, rubio, oscuro).
Fases:
-
Mantequilla fundida al fuego mezclada con la harina cruda en proporciones
iguales. (No siempre el gramaje tiene por qué ser igual).
-
Cocer a fuego lento para evitar que tome color.
-
Cuando alcance el punto deseado de cocinado, retirar del fuego y dejarlo
atemperar.
-
Añadir el líquido que ha de estar hirviendo al roux atemperado. (Si la cantidad
es pequeña podremos realizar este paso de una sola vez pero si la cantidad es
considerable agregaremos el líquido en pequeñas proporciones al principio, para
ir aumentando estas de manera progresiva hasta conseguir diluir todo sin la
aparición de grumos).
-
Independientemente del método utilizado, es importante remover homogénea y
rápidamente el roux para ayudar a la absorción del líquido y evitar la
formación de los antemencionados grumos.
-
La ligazón se producirá de forma progresiva por la acción del calor.
- Si una vez terminada la elaboración
observáramos que la salsa no queda
fina, recurriremos al colado y tamizado para que el resultado final sea óptimo.
- El color del roux
vendrá como consecuencia del tiempo de cocción empleado en el primer paso
expuesto anteriormente. Así pasaremos del blanco al rubio y de éste al oscuro
progresivamente.
Aplicaciones:
- Roux blanco: Salsa
Bechamel y derivadas, Veloutes, Salsas blancas diversas, cremas, etc.
- Roux rubio: Salsa de
tomate, salsa Americana.
- Roux Oscuro: Para la
salsa Española.
Bocuse.
Los roux: oscuro-dorado-blanco.
El roux es
el factor de ligazón de una salsa, excepción hecha de las salsas emulsionadas,
en las que el roux es sustituido por yemas de huevo. La cocción de los roux
debe ser llevada a cabo con sumo cuidado.
En los tres casos, las proporciones son idénticas: 500 g de
mantequilla y 600 g de harina lo que da lugar a un kg de roux cocido.
Método: derretir la mantequilla y dejarla cocer hasta que
alcance el punto de clarificación, es decir, hasta que se haya evaporado toda
la humedad que lleva incorporada. Agregar la harina y mezclarla con la
mantequilla, utilizando para ello una espátula o cuchara de madera.
Procurar que la mezcla se vaya calentando y cociendo lenta y
progresivamente con el fin de permitir que los elementos activos de la harina
(el almidón por Ej.) Inicien un principio de fermentación, para transformarse
luego en dextrina, sustancia soluble que posee la propiedad de espesar el
líquido al que se halla asociada.
Remover muy a menudo y mantener la preparación en estado de
cocción hasta el momento en que el roux adquiera una bonita coloración algo
oscura si se trata de un roux oscuro. La cocción será menor en el caso de un
roux dorado utilizado en las salsas y aún menor para un roux blanco utilizado
en las sopas o potajes.
En cualquier caso, el tiempo de cocción no deberá ser nunca
inferior a 15 min.
Los roux pueden ser preparados por adelantado y conservados
en un lugar fresco en un cuenco.
Se utilizan siempre cuando están fríos para mezclarlos a un
líquido casi hirviendo. Con el fin de evitar la formación de grumos se
procederá de la siguiente manera: echar el roux en la brasera en la que se vaya
a cocer la salsa o el potaje. Verter en ella una pequeña cantidad de líquido
hirviendo (jugo, fondo, caldo, o leche); desleir con un batidor para salsas. La
mezcla adoptará el aspecto de una pasta; cuando esta haya quedado homogénea
repetir la operación añadir más líquido; calentar progresivamente hasta llegar
a la ebullición e incorporar la totalidad del líquido previsto.
Nota: para obtener salsas oscuras, preconizamos se siga el
procedimiento denominado torrefacción de la harina en seco. Este procedimiento
es el más higiénico. También es más sencillo. Extender la harina sobre una
placa de repostería y ponerla a tostar en un horno graduado a temperatura
moderada. Conservarla en un recipiente bien cerrado, lista para cualquier uso.
Desleírla en frío con el fondo adecuado y llevarlo a ebullición.
Pellaprat.
Rubios.
Estos rubios
son los elementos de ligazón de las salsas. Existen de tres clases: el
rubio blanco, el rubio dorado y el rubio
oscuro. Su utilización varía, según la salsa que se tenga que confeccionar. Así
se utiliza, el rubio oscuro para la ligazón de media glasa, el rubio rojo para
los veloutés y el rubio blanco para bechamel.
Rubio blanco. 125 g
mantequilla; 150 g harina.
El rubio
blanco se obtiene cociendo suavemente, durante cinco minutos, la mantequilla y
la harina, removiéndolo constantemente con la espátula.
Rubio dorado. 125 g
mantequilla; 150 g harina.
Mismas
proporciones que para el rubio blanco, pero no se detiene la cocción hasta que
la grasa y la harina tomen un color ligeramente dorado.
Oscuro. 125 g de vaca o grasa del cocido; 150 g de
harina.
.
Hacer fundir
la grasa y después añadirle la harina. Cocer lentamente y durante mucho rato en
el horno, procurando removerlo con frecuencia para que tome un color tostado,
pero sin que se queme la grasa o la harina.
Ligazón con los rubios. Para
obtener una ligazón perfecta, fina y sin grumos, se mojará siempre un rubio
frío con un fondo caliente, y un rubio caliente con un fondo previamente enfriado.
Escoffier.
Los rubios (roux).
Los rubios
constituyen la base de la ligazón delas salsas.
Rubio o roux oscuro, para fondo. Proporciones para cien g: 50 g de
mantequilla refinada y 60 g de harina tamizada.
Derretir la mantequilla en una cazuelita de tamaño
proporcionado a la cantidad de rubio que se desee preparar y a continuación
trabar la harina a fuego lento. Una vez cocido, el rubio oscuro debe tener un
tinte castaño y formar una pasta sumamente fina.
100 g de rubio son suficientes para ligar un litro y medio de
fondo oscuro.
Rubio o roux claro, para fondo. Las proporciones son las mismas que
para el rubio oscuro, es decir, 50 g de mantequilla refinada y 60 g de harina
tamizada.
La cocción debe hacerse muy lentamente, terminándola en el
momento en que el rubio adquiere un tinte ligeramente tostado.
Práctico.
Roux oscuro. Manteca clarificada o grasa de la marmita,
mezclada con harina. Cocinarla al horno, removerla con una espátula de vez en
cuando hasta que la composición haya tomado un color tostado.
Roux blanco.
Proceder de igual forma.
Cocinarlo solamente algunos minutos.
2.2.2.
Ligazones con proteínas de origen animal.
-
Huevos enteros.
Fases:
- Batir muy
ligeramente los huevos hasta conseguir una mezcla homogénea entre clara y yema;
añadir progresivamente la leche hirviendo, azucarada y aromatizada sobre los
huevos batidos y mezclar. Terminar la elaboración al fuego teniendo la
precaución de que no se nos corte por efecto de la coagulación.
Una vez
realizada y satisfecha la operación anterior debemos cambiar rápidamente la
preparación a un recipiente de material inalterable para que enfríe lo más
rápido posible.
- Añadir tal
cual en ciertos preparados como parte de la preelaboración de éstos. Mezclar
perfectamente.
Aplicaciones:
- Base para
cremas de repostería.
- En farsas
para patés, terrinas, gelatinas y albóndigas.
-
Yemas con azúcar.
Fases:
-
Añadir
progresivamente la leche aromatizada e hirviendo sobre la mezcla de yemas con
azúcar.
-
Cocer hasta
que nape (precaución con las temperaturas de cocción para evitar que se corte
la mezcla, así como una especial atención a no dejar de mover mientras
trabajemos sobre el fuego), pasar y espumar.
Cambiar de
recipiente, enfriar y mantener en cámara a 3 º C, puesto que estamos ante un
tipo de cremas muy susceptibles de ser contaminadas por gérmenes patógenos.
Aplicaciones:
-
Crema
inglesa.
-
Base de los
helados al huevo, crema inglesa.
-
Base de
bavarois.
- Yemas mezcladas con nata líquida.
Fases:
-
Añadir un
poco de la cantidad del líquido sobre la mezcla para diluirla.
-
Añadir esta
mezcla al líquido poco a poco.
-
Cocer hasta
que nape o llevar otra vez a ebullición y colar.
Aplicaciones:
-
Consomés
ligados.
-
Ligazón de
veloutes.
-
Ligazón de
blanquetas.
-
Yemas o huevos enteros utilizados en segunda
ligazón en una preparación a base de almidón.
Fases:
-
Las
preparaciones de almidón ligadas en una segunda ligazón con yemas de huevos o
huevos enteros pueden y deben cocer unos minutos sin problemas.
-
Se realizará
la mezcla entre ambas materias con varilla en un recipiente de material
inalterable y en frío. A continuación se añadirá un poco de líquido hirviendo a
la mezcla para ayudar a una mejor licuación. Por último se verterá toda la
mezcla pasándola por un colador de malla fino sobre el resto del líquido que
estará sobre el fuego.
No se dejará
de mover durante el periodo que permanezca cociendo para evitar que se agarre
al fondo del recipiente.
Una vez
terminado cambiar a un recipiente de material inalterable, enfriar y mantener
reservado en cámara a 3 º C para ulteriores utilizaciones.
Aplicaciones:
-
Crema
pastelera.
-
Natillas.
-
Veloutes.
-
Aparejo de
Soufflé.
-
Yemas utilizadas en crudo como emulsionante.
Consiste en
el batido prolongado de las yemas en un recipiente de material inalterable en
un lugar frío. Cuándo éstas hayan aumentado su volumen se les empieza a
adicionar a chorro fino, constante y sin dejar de batir aceite de semillas o
refinado y de baja graduación para conseguir elaborar una salsa fría denominada
Mahonesa.
Observaremos
que a medida que vamos incorporando la grasa, nuestra salsa irá blanqueando y
espesando.
-
Yemas en semi coagulación utilizadas como
emulsionante.
Es un
sistema parecido al anterior en el que cambia el tipo de grasa y la temperatura
de elaboración.
Se debe
realizar con mantequilla clarificada y en un lugar que ronde los cuarenta
grados (en la zona caliente de la cocina cerca de las fuentes de calor, en un
baño María, etc).
Un ejemplo
claro de este tipo de emulsión son las salsas Bearnesa y Holandesa.
-
Ligazón utilizando la sangre o el coral.
Fases:
-
Desleir la
sangre o el coral en un poco de líquido caliente, para después agregar poco a
poco la ligazón a la preparación.
-
Debemos
evitar la ebullición por la tendencia a cortarse que tiene, aunque la podríamos
mantener en el caso de segunda ligazón con almidón.
Aplicaciones:
-
Civet.
-
Morcillas.
-
Calderetas.
-
Salsas al
vino blanco con el coral.
-
Salsa
Americana para langosta o bogavante.
- Ligazones
por la reducción de un fondo, jugo o fumet.
Fases:
-
La reducción
de estos líquidos con elementos gelatinosos produce por si sola líquidos de
consistencia de sirope, brillantes y muy sabrosos.
-
Esta
reducción puede utilizarse tal cual o mezclarse con nata reducida o montarse
con mantequilla.
-
Ligazón por
reducción de nata líquida. Esta reducción asociada a otros elementos de
ligazón, fondos o fumet reducidos o a mantequilla emulsionada producen una
cierta untuosidad en las preparaciones en las que se use.
Aplicaciones:
-
Todas las
salsas de crema.
-
Salsa al
vino blanco para pescados pochados o al caldo corto o breseados.
- Ligazones
por emulsiones de cuerpos grasos.
La
mantequilla y otros cuerpos grasos como el aceite añadido poco a poco y montado
o con la varilla o con movimientos rotatorios, ligan produciendo cierta
untuosidad.
Las
preparaciones montadas con mantequilla no pueden volver a hervir.
Aplicaciones:
-
Mantequillas
fundidas.
-
Mantequillas
emulsionadas.
-
Terminación
de salsas y potajes.
-
Elaboración
de salsas con nombre propio como el Pil-Pil.
2.2.3. Mantequillas compuestas.
Son las
preparaciones culinarias a base de mantequilla, de elementos aromáticos y
colorantes, crudos o cocinados para empleos diversos.
Se
clasifican de la siguiente manera:
a)
Mantequillas compuestas realizadas en frío a
partir de ingredientes crudos.
-
Mantequilla
Maitrê D´hotel. Mantequilla,
zumo de limón, perejil picado, sal y pimienta.
Mezclar los
ingredientes con la mantequilla en pomada.
Carnes y
pescados a la parrilla.
100 gr
mantequilla; el zumo de medio limón; sal; pimienta; 20 gr de perejil picado.
-
Mantequilla
de anchoas. Mantequilla,
filetes de anchoa en aceite escurridos, pimienta.
Mezclar y
pasar por el tamiz.
Pescados a
la parrilla y canapés.
Cuatro
filetes de anchoa para 100 gr mantequilla.
-
Mantequilla
de salmón. Mantequilla
y salmón ahumado.
Mezclar y
pasar por el tamiz.
Canapés.
-
Amande. Pasta de almendras dulces machacadas con un
poco de agua fría. Añadir manteca. Pasar al cedazo.
-
Bogavante. 100 gr huevas y coral de bogavante; 200 gr
de mantequilla. Machacar en el mortero las huevas del bogavante y agregarlas a
la mantequilla. Pasar por el tamiz.
-
Pellaprat. Café de París. Un kg mantequilla; 60
gr Ketchup de tomate; 25 gr mostaza; 25 gr alcaparras; 125 gr escalonias; 50 gr
perejil; cinco gr mejorana; cinco gr eneldo; cinco gr tomillo; diez hojas de
estragón; una pizca de romero; un diente de ajo; ocho filetes de anchoa; una
cucharada de coñac; una cucharada de vino de madera; media cucharada de salsa
Worcestershire; una cucharada de páprika; media cucharada de curry; una pizca
de cayena; ocho gr de pimienta; el zumo de un limón; media piel de limón; un
cuarto de piel de naranja; doce gr de sal.
Poner todos
los ingredientes, menos la mantequilla en una terrina. Taparlo y dejarlo en la
cocina 24 horas para que fermente un poco. Pasar por un triturador, para
obtener un puré fino y homogéneo. Aparte, trabajar la mantequilla hasta dejarla
como una pomada, añadirle el puré y mezclarlo bien. Guardar esta mantequilla en
una terrina tapada y en sitio fresco, y así se conservará durante varias
semanas.
-
Caviar. Machacar caviar con una cantidad relativa de
manteca. Pasar a la estameña.
-
Estragón. Machacar hojas de estragón con manteca.
Pasar. Se podría hacer blanqueando el estragón durante un minuto, escurrirlo,
exprimirlo y agregarlo a la mantequilla. Pasar por tamiz. 250 gr mantequilla
para 100 gr de hojas de estragón.
-
Hareng. Machacar filetes de arenques. Agregar
manteca. Pasar.
-
Manié. Manteca mezclada con harina a partes
iguales.
-
Moutarde. Manteca mezclada con mostaza francesa.
-
Pistaches. Como la manteca de almendras pero sustituyendo
éstas por pistachos. 100 gr mantequilla por 50 gr de frutos secos.
-
Raifort. Raspar sisimbrio y machacarlo con manteca.
Pasar a la estameña. El sisimbrio es una especie de rábano silvestre que se
cría donde hay agua. Es picante.
-
Viennoise. Machacar en el mortero: escaluñas, un poco de
espinacas, hojas de estragón, perifollo, filetes de anchoa. Luego de bien
machacado todo agregar la manteca y hacer bien la mezcla. Sazonar y pasar por
cedazo fino.
b)
Mantequillas compuestas realizadas en frío a
partir de elementos cocinados.
-
Mantequilla
Colbert. Mantequilla Maitrê d´hotel, glace
de carne, estragón o perejil. Mezclar todos los ingredientes con la mantequilla
en pomada. Carnes, pescados y aves a la parrilla.
100 gr
mantequilla; el zumo de medio limón; sal; pimienta; 20 gr de estragón picado;
20 gr grasa de carne fundida.
-
Mantequilla
Bercy. Mantequilla, chalotas picadas,
vino blanco, tuétano en dados, sal y pimienta. Reducción del vino blanco con la
chalota, enfriar y mezclar con la mantequilla el perejil y el tuétano. Carnes y
pescados a la parrilla.
Un dl vino
blanco; dos escalonias picadas; 50 gr tuétano de vaca cocida en agua y cortado
en trocitos; 100 gr de mantequilla; sal; pimienta y zumo de limón.
-
Mantequilla
Marchand de vins.
Mantequilla, chalota picada, vino tinto, tomillo, laurel, glace de carne,
limón, perejil picado, sal y en ocasiones puede llevar tuétano en dados.
Reducir el vino con la chalota, el laurel y el tomillo y la pimienta. Añadir la
glace, enfriar y añadir la mantequilla en pomada el zumo de limón y el perejil
picado. Sazonar. Carnes de buey a la parrilla.
Un dl vino
tinto; 20 gr escalonias picadas; sal; pimienta; 100 gr mantequilla; 20 gr
perejil picado; 20 gr glasa de carne derretida.
Reducir el
vino a la mitad con la escalonia. Pasar por la batidora-mezcladora.
-
Ail. Granos de ajo blanqueados y machacados al
mortero. Añadir manteca. Pasar a la estameña.
Se puede
hacer con los ajos en crudo. 100 gr de ajo pelado; 125 gr mantequilla.
-
Avelines. Avellanas tostadas, sin piel, machacadas en
pasta con algunas gotas de agua. Añadir manteca. Pasar al cedazo.
-
Beurre vert. Espinacas crudas, machacadas y prensadas con
un repasador. El jugo obtenido se coloca dentro de un baño y se hace reducir al
baño de María, y luego escurrirlo sobre una servilleta tendida. Recoger el
verde y mezclarlo con manteca. Pasar a la estameña.
-
Chivry. Perejil, escaluñas, estragón, cebollina,
pimpinela fresca. Todo picado y blanqueado. Escurrirlo bien con un repasador.
Luego machacarlo y agregar manteca. Pasarlo por el cedazo.
-
Escargots. (Para los caracoles a la Parisiense).
Reducir un buen vaso de vino blanco con 100 gramos de escaluñas picadas. Dejar
enfriar. Agregar 1 kilo de manteca, 2 puñados de miga de pan, 1 de perejil,
cebollina, perifollo y estragón, 2 granos de ajo y ½ lata de champignons, todo
picado fino, una copa de coñac, sal, cayena y nuez. Hacer bien la mezcla.
Guardar en sitio fresco.
-
Laitance. Machacar lechecillas de pescado blanqueadas.
Agregar manteca y algo de mostaza. Pasar.
-
Montpellier.
Hojas blanqueadas de berro,
perejil, estragón, perifollo y espinacas. Agregar escaluñas, pepinillos,
alcaparras, granos de ajo, filetes de anchoa, yemas duras y crudas. Machacarlo
todo, agregando poco a poco una pequeña cantidad de aceite y manteca. Pasar al
cedazo. Sazonar.
-
Páprika. Cebolla picada erogada a la manteca,
adicionada de páprika. Pasar al cedazo y mezclarlo con manteca.
-
Printaniers. Manteca de legumbres tiernas.
-
Ravigote. Como la Chivry.
-
Tomates. Tomates pelados, escurridos y machacados.
Añadir manteca. Pasar a la estameña.
-
Trufes. Machacar las trufas con Bechamel. Añadir
manteca. Pasar a la estameña.
c)
Mantequillas compuestas realizadas en
caliente y luego enfriadas o servidas recién hechas.
-
Mantequilla
de crustáceos. Mantequilla,
caparazones y cabezas de crustáceos. Machacar las cabezas y los caparazones con
la mantequilla. Fondear, colar por una estameña a un recipiente metido en agua
con hielo. Volver a fondear y decantar. Terminación de salsas y cremas a base
de crustáceos.
-
Beurre
blanc. Reducir a gran fuego ½ vino
blanco y ½ de agua, adicionado de un poco de vinagre y escaluñas cortadas
finas. Luego de casi reducido del todo agregar la manteca y montar sobre el
fuego moviendo continuamente el utensilio.
-
Beurre
rouge. Desperdicios y carcasas de
langosta y langostinos, machacados al mortero con manteca. Hágase fundir al
fuego lento y pasarlo con una estameña dentro de una terrina con agua fría
Luego recoger la manteca.
-
Bordalaise. Proceder lo mismo que Tonelier.
-
Crevettes. Camarones o langostinos machacados con manteca.
Pasar.
-
Echalotes. Reducción de vino blanco con escaluñas
picadas finas erogadas a la manteca. Montar fuera del fuego con manteca, jugo
de limón y un poco de glace de viande. Sazonar.
-
Meunière. Manteca Noisette adicionada de jugo de
limón.
-
Noir. Manteca cocida hasta que ha tomado un color
bastante oscuro, sin llegar a quemarla. Agregar algunas gotas de vinagre.
-
Noisette. Manteca cocida con menos color que la negra.
-
Polonaise. Manteca Noisette con miga depan fresco
dorada en la misma manteca. Al momento de verterla sobre la pieza agregar un
poco de huevo duro pasado por el cedazo y algo de perejil picado.
-
Tonelier. Reducción de vino blanco con escaluñas
picadas. Agregar glace de viande, jugo de limón. Montar fuera del fuego con
manteca. Perejil picado y dados de tuétano.
Bocuse.
Mantequillas
compuestas. Las mantequillas compuestas se
preparan mezclando con mantequilla fresca sustancias alimenticias, tales como
carnes cocidas, pescados, crustáceos, verduras o condimentos triturados
previamente en el mortero y luego prensados a través de un tamiz fino o una
estancia.
Esas mantequillas son utilizadas en determinadas
preparaciones de entremeses o para dar un toque final a algunas salsas.
En diferentes casos, las mantequillas compuestas son tratadas
en caliente, cocidas o simplemente derretidas con los elementos que las
complementan.
Se preparan de esta forma mantequillas colorantes a base de
gambas, cangrejos de río, bogavante, etc.
Mantequilla de
anchoa. Majar en el mortero 15 filetes de
anchoa previamente desalados, junto con 200 g de mantequilla fresca; pasar por
un tamiz fino.
Mantequilla de ajo. Idéntica preparación con 8 dientes de ajo, 5 g de sal
y 300 g de mantequilla fresca.
Mantequilla Vert-Pre
o de berros. Echar en agua hirviendo, por partes
iguales, perifollo, estragón, pimpinela, perejil y cebolleta; hacer hervir
durante un minuto, escurrir, refrescar con agua fría y estrujar. Pesar esos
ingredientes y majarlos en mortero junto con el mismo peso de mantequilla
fresca. Sazonar y pasar por el tamiz. Agregar a la composición un buen puñado
de berros cuyo sabor debe predominar.
Mantequilla de
foie-grass. 1º. Majar en el mortero 150 g de foie
cocido y 150 g de mantequilla fresca; sazonar y pasar por el tamiz; realzar con
una pizca de pimienta de cayena.
2º. Pasar por el tamiz 100 g de foie-grass apenas cocido.
Preparar 100 g de mantequilla empomada y mezclar con ella el puré de foie y una
cucharada de vino de Oporto.
Sazonar con una pulgarada de sal y una pizca de pimienta de
cayena.
Mantequilla de Roquefort. Amasar 200 g de queso con 200 g de mantequilla fresca.
Mantequilla de
caracoles. Ingredientes: 1 kg de mantequilla de
1ª calidad; 20 g de sal de cocina un poco gorda; 1 g de pimienta recién molida;
una pizquita de nuez moscada recién rallada; 50 g de ajo machacado; 40 g de
escalonia picada; 50 g de almendras dulces y 100 g de perejil picado muy fino.
Método: echar en un mortero la sal la pimienta la nuez
moscada el ajo la escalonia y las almendras. Triturar todos esto elementos
hasta conseguir una pasta homogénea. Tras esto agregar el perejil y la
mantequilla ligeramente reblandecida. Amasar nuevamente con la mano del almirez
de manera que se consiga una mezcla perfecta.
Antes de su utilización conservar en lugar fresco en un
cuenco de gress.
Mantequilla de
almendras. Echar en agua hirviendo 100 g de
almendras dulces, escurrirlas de inmediato y pelarlas, es decir, quitarles la
piel ejerciendo presión entre el pulgar y el índice; majarlas en el mortero
agregando algunas gotas de agua fría a medida que las almendras se van
convirtiendo en pasta y ello con el fin de evitar que tornen aceitosas.
Terminar la operación con 125 g de mantequilla fresca.
Mantequilla Bercy. Reducir a la mitad un dl de vino blanco seco al que se
habrá añadido media cucharada de escalonia picada muy menuda; dejar que se vaya
enfriando un poco la reducción e incorporarle 100 g de mantequilla mezclando
con una varilla o una espátula. Agregar 250 g de tuétano de buey cortado a
daditos, escalfado en agua salada y escurrido. Una cucharadita de perejil
picada, el zumo de medio limón, una pizca de sal de cocina y de pimienta recién
molida.
La mantequilla Bercy es servida tibia con carnes o pescados a
la parrilla.
Mantequilla de
gambas. Machacar en el mortero un peso igual
de gambas grises cocidas y de mantequilla. Seguidamente, prensar esta mezcla a
través de un tamiz muy fino, con preferencia al mismo tiempo que la salsa o la
sopa a la que está destinada.
Mantequilla de
cangrejos de río. Proceder de
igual forma que la anterior, machacando mantequilla fresca y caparazones de
cangrejos de río a pesos iguales, cocidos y salteados en mantequilla y a los
que se habrá sumado, para cada 12 cangrejos, una cucharadita de mirepoix
(mezcla a pesos iguales de zanahoria y cebolla cortadas a daditos minúsculos,
erogados suavemente en mantequilla); es importante dejar adheridas a los
caparazones las partes cremosas de los cangrejos de río.
Mantequilla de
bogavante o de langosta. Idénticas
proporciones y procedimiento que la anterior.
Mantequilla de
mostaza. 100 g de mantequilla fresca amasada
con una cucharadita de mostaza de Dijón.
Mantequilla de
nueces. Utilizar las cantidades y utilizar el
método indicados en la receta de la mantequilla de almendras.
Mantequilla de
Páprika. Amasar 100 g de mantequilla fresca
con una pizca de Páprika.
Mantequilla de
rábano blanco.
Majar en el mortero
50 g de rábano blanco rallado; agregar 125 g de mantequilla fresca. Pasar la
preparación por el tamiz.
2.2.4. Caldos.
a)
Marinadas.
Son las
preparaciones líquidas, aromáticas, destinadas a aromatizar, enternecer y
prolongar la duración de conservación de carnes rojas y pescados.
Pellaprat.
Marinadas. La marinada
es un líquido aromatizado que se emplea para macerar ciertas carnes, caza, etc.
Su misión es impregnar, perfumar y ablandar las carnes y asimismo, conservarlas
durante un cierto tiempo. La duración de este adobo varía, según la naturaleza
y el tamaño de la pieza; en invierno, unos seis días y en verano dos o tres.
Por lo
general, ya no se acostumbra a marinar la silla de corzo ni la silla de corzo
ni la silla de liebre, a fin de no alterar el sabor tan delicado de estas
carnes; se puede, sin embargo, marinar el ciervo, el jabato y caza mayor.
Marinada cruda.
Tres
zanahorias; dos cebollas; tres escalonias; unos granos de pimienta; dos clavos;
raíces de perejil; tomillo; una hoja de laurel; 15 cl de vinagre; tres cuartos
de litro de vino blanco o tinto; cuatro cucharadas de aceite.
Disponer en
un recipiente hondo el trozo de carne que se quiera marinar. Poner encima
cebollas y escalonias en rodajas, una pizca de granos de pimienta chafados,
algunos granos de enebro, los clavos, el perejil, el tomillo, el laurel (no
atados). Salar ligeramente y remojar con el vino y el vinagre. Rociar por
encima la carne con aceite, para evitar así que se ponga negrea la parte que no
quede cubierta. Ponerlo al fresco y dar la vuelta a la carne varias veces.
Dejar marinar veinticuatro horas los trozos pequeños (chuletitas,
landrecillas), y dos o tres días las piezas grandes, según su volumen (pierna
de corzo, jabalí, etc.)
Marinadas para pequeñas piezas de caza.
Para poner
muy tierna la carne de chuletas y landrecillas, basta con dejarlas marinar en
aceite de oliva, sal y pimienta, una hora antes de la cocción. Sería una
lástima destruir el gusto de estas carnes con vinagre o jugo de limón.
Marinada cocida.
Los mismos
elementos que la receta anterior, pero haciendo cocer las legumbres con el vino
y el vinagre, aumentando un poco las proporciones de ambos, teniendo en cuenta
que con el calor se evaporan; cocerlo una hora. Si se quiere obtener
rápidamente una carne marinada, hay que echarla hirviendo, por encima de la
carne (a condición de que ésta sea muy fresca); de esta forma, se obtendrán
unas piernas de corzo perfectamente marinadas en veinticuatro horas, y pequeñas
piezas en cuatro o cinco horas. Algunas veces también se hacen marinar piernas
o chuletas de cordero, y entonces se les da el nombre de “piernas o chuletas en
corzo”.
Práctico.
Marinada
instantánea. Escaluñas
cortadas, colas de perejil, sal, pimienta, tomillo, laurel, jugo de limón y
aceite. Echar por encima de lo que se quiere marinar.
Marinada
cruda. En terrina: zanahoria, cebolla,
escaluñas, apio, ajo, colas de perejil, tomillo, laurel, pimienta, clavos;
mojar ½ vino blanco o tinto, ¼ de vinagre, ¼ de aceite. Colocar las piezas
adentro. Sazonar.
Marinada
cocida. El mismo procedimiento que la
anterior; pasar las hierbas o legumbres a la sartén con aceite; mojar con vino
blanco y vinagre. Cocinar 20 minutos. Dejar enfriar antes de emplearla.
Marinada al
vino tinto. El mismo
procedimiento que la marinada cocida. Emplear vino tinto y menos vinagre; o
nada, según el caso.
Hay tres
tipos de marinadas:
a-
Crudas
b-
Cocidas
c-
Instantáneas
a)
Crudas. Se utilizan principalmente para las
carnes de vacuno mayor y caza.
Composición:
-
zanahorias,
cebollas, puerro en trozos
-
apio en rama
-
ajos
machacados
-
perejil,
tomillo y laurel
-
pimienta en
grano
-
vino blanco
o tinto
-
aceite
Técnicas o fases:
-
preparar la
pieza de carne
-
sazonar
-
poner la
mitad de la guarnición en la parte de abajo del recipiente de acero inoxidable
-
poner la
pieza y cubrir con el resto de la guarnición
-
añadir el
vino
-
cubrir con
una película de aceite y tapar el recipiente con film
-
mantener en
la cámara a 3 º C
-
dar la
vuelta a la pieza de vez en cuando
b)
Cocidas. Para grandes piezas de carne de
animales mayores y de caza que tengan un gusto fuerte.
Composición:
es la misma que la anterior.
Técnica –
fases:
-
rehogar las
hortalizas en el aceite
-
cocer con el
vino
-
añadir el
bouquet garní, el ajo, la sal y las especias
-
cocer
despacio durante ½ hora
-
refrescar
rápidamente
-
meter la
pieza y conservar en la cámara a 3 º C
La marinada
debe estar totalmente fría antes de introducir la pieza. Tiene las mismas
propiedades que la anterior pero la ventaja de acelerar los tiempos de
penetración de los compuestos aromáticos y se conserva mejor.
c)
Instantáneas. Se aplican a pequeñas piezas.
Carnes a la parrilla: aceite,
tomillo y laurel en polvo, hierbas aromáticas.
Pescados parrilla: aceite,
rodajas de limón peladas, laurel y tomillo en polvo.
Pescados crudos cortados en finas láminas: sal, azúcar, aceite de oliva y zumo de
limón. Sal, vinagre y aceite.
Hortalizas:
-
meter en sal
durante 24 horas
-
aceite,
vinagre, cebollitas pequeñas, ajo, pimienta engrano.
Técnica –
fases:
-
extender en
una placa los géneros
-
cubrir con
la marinada
-
el tiempo
dependerá del origen anatómico de la pieza, de su grosor y de su peso.
b)
Caldo corto
o Court Bouillon.
Son las
preparaciones líquidas, aromáticas, perfumadas y aciduladas, que se utilizan
para cocer los pescados enteros o sus lomos y en algunos casos los crustáceos.
Composición:
-
Agua,
vinagre (para crustáceos o salmón); zumo de limón (para pescados blancos) vino
tinto (Matelotes). Leche (para pescados que deben resultar muy blancos, como el
rodaballo).
-
Hortalizas:
Puerro, cebolla, zanahoria, apio, chalota.
-
Hierbas
aromáticas: Tallos de perejil, tomillo y laurel.
-
Especias:
Granos de pimienta.
Su
denominación internacional es Court-Bouillón.
Elaboración:
Se pone todo a cocer a fuego moderado
regulando su cocción; no es imprescindible que el agua hierva. Cuando se trata
de pescados grandes, puede usarse el termómetro para que el caldo no sobrepase
los 95º C. Se retira del fuego y se deja enfriar total o parcialmente en el
caldo.
Para los mariscos el caldo deberá
estar hirviendo.
Bocuse.
El caldo
corto es el líquido de cocción en el que se cuece un pescado totalmente
sumergido. Existen diferentes tipos de caldos cortos.
Caldo corto
blanco para rodaballo o barbadas de gran tamaño.
Ingredientes:
3 l de agua; 2 dl de leche; 45 g de sal; 4 rodajas de limón peladas hasta la
pulpa y sin pepitas. Se vierte en frío sobre la pieza por tratar, a la que
apenas debe cubrir.
Caldo corto
al vinagre.
Ingredientes:
3 l de agua; 2 dl de vinagre; 40 g de sal; 2 zanahorias de tamaño mediano y 2
cebollas grandes cortadas en finas rodajas; unas ramitas de perejil; una ramita
de tomillo; ½ hoja de laurel; una pulgarada de pimienta en grano, echada 10
minutos antes de que finalice la cocción.
Hacer hervir a fuego suave por
espacio de 40 minutos y pasar por un tamiz. Se vierte frío sobre el pescado por
tratar.
Caldo corto
al vino blanco.
Idénticas proporciones que para el
caldo corto al vinagre, suprimiendo este último y sustituyendo un l y medio de
agua por la misma cantidad de vino blanco seco. Para la cocción, proceder de
igual forma.
Caldo corto
al vino tinto.
Ingredientes:
3 l de vino tinto de buena calidad, agregados a las verduras y condimentos
indicados en la receta del caldo corto al vinagre. Tiempo de cocción: 40
minutos a fuego lento.
Pellaprat.
El caldo-corto siempre debe prepararse con
anticipación. Si el tiempo de cocción del pescado pasa de los 30 minutos, el
caldo-corto se echa frío encima del pescado, y las hierbas aromáticas se meten
debajo la parrilla de la besuguera.
Caldo-corto
I. Para salmones, truchas salmonadas, langostas
y bogavantes. Cocción: una hora.
Proporciones
para cinco litros de agua: 500 g zanahorias y 500 g cebollas cortadas finas;
una ramita tomillo; dos hojas pequeñas de laurel; 75 g de perejil; un litro y
cuarto vinagre; cinco g sal; 15 g pimienta en grano, añadidos diez minutos
antes de colar el caldo corto.
Caldo-corto
II. Para truchas, carpas, guisos de
pescado en general y crustáceos. Cocción : 30 minutos.
Proporciones
para cada cinco litros: dos litros y medio vino blanco seco; dos litros y medio
agua; cinco escalonias cortadas finas; 400 g zanahorias cortadas finas; 400g
cebollas cortadas finas; 75 g rabos de perejil; una rama tomillo; una hoja
laurel; 50 g sal; 15 g pimienta en grano, puestos diez minutos antes de colar
el caldo-corto.
Caldo corto
III. Para piezas grandes tales como
rodaballos y barbadas. Cubrir
completamente la pieza con agua fría. Añadir un dl de leche, una rueda de limón
mondado y 15 g de sal por l de agua.
Caldo corto
para pescados.
Para la
cocción de los pescados en caldo-corto se ha de evitar la ebullición, que haría
abrir las carnes. Es preciso retirar la marmita a un lado del fuego antes que
se produzca la ebullición, continuando a fuego suave durante un tiempo que
depende del tamaño y peso del pescado.
Las piezas grandes siempre se ponen
a cocer en frío. Los pescados troceados o pequeños se meten en el caldo-corto
cuando está a punto de ebullición.
Cuando un pescado deba servirse
frío, es necesario que se enfríe casi por completo dentro de su propia cocción,
evitando así que se seque la carne, cosa que se produciría inevitablemente por
la evaporación. Luego se le deja enfriar totalmente fuera del caldo cubriendo
el pescado con un paño mojado.
Práctico.
Court-bouillon.
(a). Para
pescados de mar de carne blanca. Agua, sal, jugo de limón, zanahoria canaletada
y cortada en medias lunas, puerros en trozos regulares, apio, cebolla en
anillos gruesos, puntas de perejil.
(b). Para
pescados como los anteriores. Agua, sal (200 gr por litro de agua) y leche.
(c). Para
langosta, cangrejos, salmón, langostinos. Agua, sal, vinagre, hierbas
aromáticas.
(d). Fumet
de pescado adicionado de hierbas aromáticas, vino tinto o blanco para
matelotes.
c)
Caldo
blanco.
Es el caldo
empleado para hervir hortalizas de fácil oxidación, como alcachofas y cardos.
Se mezclan
en frío el agua, el zumo de limón, la harina y la sal. Se ponen a cocer las
hortalizas en esta mezcla.
Bocuse.
Blanco para diversas cocciones. Termino culinario mediante el cual se
precisa la naturaleza de un caldo corto compuesto por: 1 l de agua, 8 g de sal,
1 cucharada colmada de harina y dos cucharadas de vinagre, o el zumo de medio
limón.
La mezcla de la harina con el agua se hace en frío y luego se
lleva a ebullición.
Se agrega seguidamente una cebolla claveteada, una zanahoria
de tamaño mediano cortada a cuartos, un ramillete de perejil, junto con una
ramita de tomillo y un trocito de hoja
de laurel.
Cuando se quiere utilizar dicho caldo corto para cocer en él
despojos o menudillos, se recomienda agregarle dos cucharadas de grasa de riñón
de ternera o de buey picada, la cual, al derretirse durante la cocción, formará
una pantalla aislante entre los elementos por cocer y el aire, que puede
provocar su ennegrecimiento. Someter a cocción dicho blanco durante 30 min. ;
pasarlo por el chino y dejarlo enfriar; seguidamente, utilizar el blanco
ateniéndose a las indicaciones específicas que figuran en cada receta.
El blanco es utilizado en la cocción de los despojos de las
carnes de matadero, así como también en la de las crestas y riñones de aves, de
determinadas verduras, tales como fondos de alcachofa, cardos, salsifíes, etc.
Es este último caso se suprimirá la grasa.
Cocción o blanco para champiñones. Llevar a ebullición medio vaso de
agua, junto con una buena pulgarada de sal, el zumo de medio limón y una
cucharada de mantequilla. Poner la brasera a fuego vivo y echar en ella de 250
a 300 g de champiñones, limpiados cuidadosamente y lavados bajo el chorro de
agua fría. Dejar hervir a fuego muy vivo durante cinco minutos; verter la
preparación en una terrina y cubrirla con un papel untado con mantequilla para
impedir el contacto con el aire.
d)
Escabeches.
Se trata del
caldo confeccionado principalmente para la conservación de pescados, ave y
caza, previamente han sido cocinados.
Composición:
-
Ajos.
-
Cebollas.
-
Laurel.
-
Tomillo.
-
Pimienta en
grano.
-
Vinagre, a
veces vino o agua.
-
En ocasiones
pimentón.
Técnica.
Fases:
-
Sofreír los
ajos, las cebollas, las hierbas y especias y el vinagre a veces vino o agua.
-
Cuando rompe
hervir se vierte sobre el género ya cocinado.
-
Cubrir
completamente, enfriar y mantener en la cámara unas 48 horas antes de ser
consumido.
e)
Adobos.
Son caldos o
elementos de condimentación que se utilizan para conservar, aromatizar y
reforzar el sabor de las carnes y los pescados.
Componentes:
-
Aceite.
-
Pimentón.
-
Ajo y
perejil.
-
Sal.
También
pueden llevar cualquier otra hierba aromática o especia y acompañarse de vino,
jerez, brandy, zumo de limón o vinagre.
Con esta mezcla
se cubren los géneros crudos o se untan las piezas. Se confeccionan siempre en
frío y se aplican sobre el género y no se mantendrán más de 48 horas. En el
caso de piezas pequeñas estas se ponen con el adobo y pueden ser utilizadas
después de media hora.
Pellaprat.
Ejemplo práctico.
Adobo de
carnero a la provenzal. Para seis
personas. Un kg espalda de carnero deshuesada; tres pies carnero deshuesados y
100 gr corteza tocino, todo ello blanqueado; 150 gr torreznos de tocino graso;
150 gr torreznos tocino magro; medio litro vino tinto; una zanahoria y una
cebolla en rodajas; una cebolla y dos dientes de ajo picados; dos ramilletes;
un dl aceite oliva; 800 gr tomates en cuartos. Cocción: cuatro a cinco horas.
Cortar la espalda a trozos de cinco
cm en cuadro. Mechar cada trozo con un torrezno graso. Ponerlo a marinar
durante 24 horas con vino tinto, aceite, la cebolla y la zanahoria a rodajas, y
un ramillete. Escurrir la carne y ponerla en una terrina con cebolla, ajo,
torreznos magros, pies y corteza. Sazonar y agregar el ramillete. Colar la
marinada por encima; añadir los tomates; tapar herméticamente y cocer
lentamente en el horno. Desgrasar y servir en la misma terrina.
Bocuse.
Los adobos.
El objetivo perseguido con los adobos es la conservación de
las carnes que se ponen a remojar en ellos, ablandar la fibra de las carnes e
impregnar éstas de las sustancias aromáticas que entran en su composición.
Adobo crudo.
(para carne de matadero o carne de caza)
ingredientes: una zanahoria de tamaño mediano; 2 cebollas; 4
escalonias; una remita de apio; 2 dientes de ajo; unos tallos de perejil; una
ramita de tomillo; ½ hoja de laurel; una pizca de pimienta recién molida; 2
clavos de especia; un l de vino blanco; 4 dl de vinagre y 2 dl de aceite.
Método: cortar en finas láminas la zanahoria, las cebollas y
las escalonias; disponer la mitad de estas verduras en el fondo de un
recipiente del tamaño adecuado para contener las piezas por adobar y el adobo,
de tal forma que este último las cubra por completo. Colocar las piezas, luego
el resto de las verduras, y los condimentos, agregar el vino blanco, el vinagre
y el aceite, el cual al permanecer en la superficie del líquido, impide todo
contacto entre los alimentos en adobo y el aire, y evita, por tanto la
descomposición de estos últimos.
Conservar en lugar fresco, dar a menudo vueltas a las piezas
en adobo. La duración de la maceración depende del volumen de las piezas en
tratamiento y de la temperatura ambiente. La operación resulta más rápida en
verano que en invierno. Para las piezas de gran tamaño, la duración de la
maceración puede ser de cinco a seis días en invierno y de 24-48 horas en
verano.
Adobo cocido.
La composición es sensiblemente igual a la del adobo en
crudo.
Método: poner a calentar el aceite en una brasera y echar en
ésta las verduras, para que tomen algo de color. Agregar el vino blanco, el
vinagre y los condimentos, y dejar cocer a fuego suave durante media hora.
Dejar enfriar por completo el adobo antes de verterlo sobre
las piezas por macerar.
Conservación de los adobos: con el fin de evitar la
alteración de los adobos, sobre todo en verano, conviene añadir un g de ácido
bórico por litro de adobo.
También resultaría conveniente hacer hervir los adobos cada
tres o cuatro días. En tal caso, hay que acidularlos nuevamente, incorporando
dos dl de vino o un dl de vinagre, dado que la ebullición habrá disminuido el
grado de alcohol y de ácido del adobo.
Nota: en determinadas preparaciones, se puede sustituir
perfectamente el vino blanco por vino tinto.
f)
Salmueras.
La salmuera
es otro procedimiento de conservación y preelaboración de pescados carnes y
hortalizas. Existen dos modalidades: en seco y en solución salina, con
diferentes variantes cada una de ellas según la aplicación.
La
aplicación de la salmuera en seco se inicia frotando la pieza con sal que
contiene cloruro sódico, nitrato potásico y sacarosa. Posteriormente se cubrirá
con sal marina y se dispondrá en lugar seco. Como mínimo tantos días como kilos
pese la pieza. Pasado este tiempo se lavará al chorro de agua fría quedando
listo para su cocinado o curado.
El nitrato
potásico o sal nitro solo se emplea para las carnes en proporción 5% de la
cantidad de sal común; es lo que da el color rojo a los “lengua escarlata” y
los jamones. Su uso es peligroso.
Se entiende
por solución salina una mezcla de agua y sal a la que se añadirá azúcar y
especias aromáticas que ha sido cocida y una vez fría tiene la concentración
deseada (18º de densidad). En charcutería la salmuera suele utilizarse en
inyección antes de la inmersión. El tiempo que debe estar el género en la
salmuera es similar al anterior.
Pellaprat.
Salmueras.
Salmuera
para lengua de vaca.
Hacer hervir
cuatro litros de agua con dos kg de sal gruesa 100 g de salitre, 150 g de
azúcar, una pizca de granos de pimienta y de enebro (ginebra) tomillo y laurel.
Dejar enfriar y echar un huevo entero muy fresco, que debe flotar. Caso que el
huevo se hunda, se añadirá sal en cantidad suficiente para lograr que el huevo
flote. Picar y golpear las lenguas para expulsar todo el aire que pueda
contener la carne, frotarlas enérgicamente, con una mezcla de 250 g de sal fina
y 15 g de salitre, echar la salmuera bien fría sobre las lenguas, que deben ser
muy frescas y bien presentadas. Dejarlas ocho o nueve días en salmuera según su
tamaño.
Salmuera en
seco.
También se
pueden salar las lenguas en seco. Para ello, hay que prepararlas lo mismo.
Golpearlas vigorosamente. Envolverlas, arrollándolas, en 200 g de sal fina
mezclada con 50 g de azúcar y 50 g de salitre. Colocarlas en un balde de
madera, cemento, loza, etc., poniendo en el fondo una capa de sal gorda (30 ó
40 g de salitre por kg de sal gruesa); encima colocar una madera con un buen
peso. A los pocos días, empezará a bañarse en el líquido que se habrá formado.
Hacen falta seis días para obtener las lenguas a media sal y once o doce días
para que estén en su punto para hacer lenguas a la escarlata. Antes de
cocerlas, tenerlas veinticuatro horas en agua corriente, o por lo menos cambiar
frecuentemente el agua.
Gran salmuera
para piezas grandes de carne.
Para diez
litros: diez litros de agua; cinco kg sal; 150 g salitre, 350 g azúcar negro.
Cocer todo junto con fuego fuerte. La salmuera estará en su punto si al echarle
una patata mondada, ésta queda flotando entre dos aguas. Si, por el contrario,
flota en la superficie, hay demasiada sal, y habrá que añadirle agua. Dejar
enfriar y echarlo en el balde para salmuera, generalmente construido en
cemento, con una parrilla en el fondo, sobre la que se colocan las piezas de
carne, presentadas impecablemente, y pinchadas profundamente con una aguja
gruesa. Un trozo de cuatro a cinco kg hay que contar con tenerlo en salmuera de
ocho a nueve días.
Bocuse.
Las salmueras.
Solución compuesta de sal común fina, de azúcar, de sal
gruesa y de agua, utilizada para la conservación de los alimentos por salazón.
Salmuera seca.
Frotar las piezas por salar con cuarenta g de sal gruesa
triturada (proporción para un kg de sal marina) y colocarlas con la sal
correspondiente en un recipiente de madera o de gres (saladero). Tener buen
cuidado en no dejar ningún hueco. Agregar una ramita de tomillo y una hoja de
laurel por cada kg de sal. Tapar herméticamente el saladero.
Las carnes que se deseen conservar en sal tienen que ser
fresquísimas. La época más favorable para las salazones domésticas coincide con
los meses de diciembre, enero y febrero. Los animales que se deseen conservar
en sal deberán ser tratados 24 h después de haber sido sacrificados, es decir
cuando las carnes ya frías se han tornado prietas.
Salmuera líquida.
Ingredientes: 5 l de agua; 2,250 kg de sal marina; 150 g de
sal gruesa; 300 g de azúcar; 12 granos de pimienta; 12 bayas de enebro; una
ramita de tomillo; una hoja de laurel.
Método: echar todos estos elementos en una brasera y poner a
hervir. Llegado este momento, comprobar la densidad de salazón introduciendo
una patata pelada en la salmuera. Si la patata flota, echar un poco de agua
hasta el momento en que empiece a hundirse. Si se hunde inmediatamente, agregar
un poco de sal o reducir el líquido con el fin de que la densidad mantenga el
tubérculo casi en la superficie.
Dejar enfriar y, luego, verter la salmuera en el recipiente
destinado a recibir las piezas por salar.
Estas últimas deberán quedar completamente sumergidas en el líquido.
Práctico.
Salmuera
seca. Por unos 20 kilos de sal gruesa
agregarle 200 gr de salitre. Las piezas de carne o lenguas destinadas a ser
saladas deben ser frescas, limpias y pinchadas con una aguja, y luego frotadas
con un poco de salitre y sal fina. Se colocan dentro de un depósito de material
o de madera en el cual se pondrá en el fondo una buena capa de sal antes de
colocar las piezas. Se cubren con otra capa de sal y se coloca un peso encima
para formar prensa. Colocarla en un sitio fresco.
Salmuera
líquida. 15 kilos de sal, 30 litros de
agua, 1 kilo de salitre, 500 gr de azúcar morena, pimienta en grano, clavos,
tomillo, laurel. Hacer hervir en una marmita estañada. Echar una patata dentro
del líquido. Si la patata nada apenas, la salmuera está a punto. Si se va al
fondo hay que añadir sal o reducir el líquido, y si la patata sobresale
demasiado del nivel, hay que añadir agua. Dejarla enfriar del todo antes de
emplearla. Colocarla en un depósito igual que la anterior o en otro adecuado y
en un sitio fresco. Colocar una rejilla al fondo del depósito. Las piezas de 4
ó 5 kilos necesitan 20 días; las lenguas 12 días, limpias, pinchadas y
frotadas. Colocar un peso encima de las piezas.
g)
Farsas.
En español
el término será relleno. Consiste en una mezcla de elementos picados muy
finamente por la picadora o tamizados, que ligados y sazonados con especias,
hierbas aromáticas e incluso vinos generosos, sirven para rellenar aves,
empanadas, huevos, hortalizas, galantinas, balotinas, pastas, etc.
Existe una gran variedad de farsas
pero se pueden agrupar en cuatro grandes bloques:
-
Farsa de
carne (aves, ternera, cerdo, caza y tocino como elementos base).
-
Farsas de
pescado (pulpa de cualquier pescado y nata).
-
Farsas de
yemas de huevo (la yema de huevo más cualquier carne o pescado cocinado y
vino).
-
Farsas de
hortalizas y legumbres (la cebolla y elementos de acompañamiento como el jamón,
el foie-gras y el champiñón).
La
composición de la farsa depende del género que se va a rellenar, así como su
sazonamiento, especias y hierbas aromáticas.
Se elaboran
en frío, homogeneizándolas sobre el hielo, o en caliente dejándolas reducir
hasta que evapore la humedad sobrante.
Pellaprat.
Rellenos y
preparaciones.
Hay varias
clases de rellenos, empezando por los rellenos de quenefas: de ternera, de ave,
de caza o de pescado. Hay también los rellenos finos con los que se rellenan
ciertas aves o pescados, presentados en forma de espuma, de panes o céfiro.
Además, los rellenos a base de cerdo, que entran en la composición de patés y galantinas
y, por último, el relleno para gratinados, completamente distintos, tanto por
su composición como por su empleo.
Para la
preparación de algunos rellenos, hay que preparar una panada. Por regla
general, se utiliza en una proporción de una tercera parte de panada, por dos
terceras partes de relleno de base. Siempre se incorpora al otro elemento una
vez fría.
Relleno
fino.
300 g
redondo de ternera o pechugas de pollo sin nervios ni grasas; 50 g de panada de
huevos; un dl crema de leche; 100 g de mantequilla; dos claras huevo; sal,
pimienta y nuez moscada.
Picar la
carne, añadir las claras de huevo poco a poco, juntándolo todo con la panada.
Trabajar con la espátula, añadiéndole la mantequilla fundida y la crema. Pasar
por el tamiz, trabajándolo en un tarro. A continuación, proceder como en el
relleno para quenefas a la panada.
Para
galantinas.
350 g de
carne magra de cerdo; 350 g carne magra de ternera; 800 g tocino magro; 35 g
sal especiada.
Cortar la
carne y el tocino en dados grandes; luego picarlo todo muy fino, salar y pasar
por el tamiz.
Para
galantinas de caza.
250 g de
ternera; 250 g de tocino; 500 g de caza; un kg tocino graso; cuatro huevos; 50
g sal especiada.
Picar
finamente las carnes y el tocino, salar, incorporar los huevos, uno a uno. Pasar
por tamiz.
Para
gratinar.
150 g tocino
graso fresco; 250 g hígado (aves, caza, ternera); 25 g escalonias; perejil,
tomillo, laurel, sal y pimienta.
Cortar en
pequeños dados el tocino graso, fundirlo en una sartén. Cuando esté fundido y
muy caliente, añadirle el hígado, cortado en láminas finas, sazonarlo,
saltearlo otros dos minutos, retirar del fuego, juntarlo todo y pasarlo por el
tamiz. Ponerlo al fresco en un recipiente cubierto de un papel untado con
aceite. Apropiado para rellenar la caza o empastar canapés.
Relleno
muselina.
250 g
ternera; 350 g crema de leche; sal, pimienta, una clara de huevo.
Picar la
carne con el sazonado, incorporando poco a poco la clara de huevo. Pasar por el
tamiz; meterlo en un tarro rodeado con hielo triturado muy prieto y batir con
crema fresca. La cantidad de crema variará según los ingredientes que se
empleen. Hacer un ensayo hasta que el relleno tenga la densidad deseada. Propio
para rellenar aves, pescados, etc. Para los pescados, reemplazar la ternera por
sollo.
Para patés.
500 g cerdo
fresco magro, de la espalda o cuello; 500 g cerdo graso fresco; 25 g sal
especiada.
Cortar la
carne y el cerdo en grandes dados. Picarlo todo muy fino, salar y pasar por el
tamiz.
De pescado.
250 g netos
de sollo (solla) crudo; 250 g panada de huevos; sal, pimienta; moscada; dos
huevos enteros y una yema.
Picar la
carne con el sazonamiento, incorporarle la panada. Trabajar con la espátula,
añadiéndole los huevos uno tras otro. Pasar por el tamiz y trabajarlo de nuevo.
Especial para galantinas y patés de pescado.
Para
quenefas a la panada.
300 g cadera
de ternera o pechugas de ave sin nervios ni grasas; 150 g panada de harina; 150
g mantequilla; dos huevos, dos yemas de huevos; sal, pimienta, moscada.
Picar la
carne en un mortero, hasta obtener un puré; sazonarla. Añadir la panada y
trabajar con la espátula, incorporándole la mantequilla. Cuando ya se tenga una
mezcla homogénea, añadir los huevos uno tras otro, mezclándolo bien entre huevo
y huevo. Pasar por el tamiz y trabajarlo de nuevo en un lebrillo. Vigilar la
consistencia del relleno, hirviendo una quenefa en agua hirviendo. Si el
relleno revienta ligeramente al tocar el agua, hay que añadirle una o dos yemas
de huevo. Mantenerlo al fresco hasta el momento de emplearlo.
Para
quenefas de pescado.
La misma
receta que para el relleno de quenefas a la panada, pero reemplazando la carne
por pescado. Siempre que sea posible, hacerlo con pescados de carne dura, como
el sollo.
Céfiro.
Proceder
como para el relleno muselina, incorporando 100 g de crema de leche batida. Se
cuece especialmente en moldes pequeños untados con mantequilla, al bañomaría, y
luego se recubre con una salsa. Se pueden hacer céfiros de pescado, de ave, de
jamón, de caza, etc.
Panada de
harina.
Para 500 g:
tres dl agua; 50 g mantequilla; 150 g harina; una pizca sal.
Disponer en
una cacerola la sal, el agua y la mantequilla. Llevarlo a punto de hervor.
Retirar del fuego, añadir la harina de una sola vez, trabajarlo muy bien con la
espátula, poner de nuevo al fuego, dejando que se seque, sin cesar de trabajar.
Extenderla y dejar que se enfríe.
De leche.
Misma
preparación que la anterior, pero poniendo leche en lugar de agua.
De huevos.
Para 500 g:
dos litros y medio de leche; 125 g de harina; dos huevos; 50 g mantequilla
fundida; sal, pimienta, raspadura de nuez moscada.
Disponerlo
todo en la cacerola, menos la leche, y trabajarlo con la espátula. Poco a poco
añadir la leche hirviendo; ponerlo al fuego y dejar que se seque. Extender y
dejar enfriar. Destinado para pescados y aves.
Ejemplos.
Farsa o
relleno de carne o ave.
Composición:
- Carne de ternera cruda magra 500 gr
- Carne de cerdo 500 gr
- Tocino fresco y graso 800 gr
- Claras frescas 3 unid
- Nata líquida ½ litro
- Sal 50 gr
- Pimienta y nuez una pizca
- Brandy y Oporto 1 dl
- Piñones 20 gr
- Trufa opcional
Fases:
-
Desangrar en
agua fría las carnes.
-
Escurrir.
-
Picar por
máquina picadora o cutter pasándola 2 ó 3 veces.
-
Mezclar la
farsa con el resto de los componentes (claras, nata, etc).
Alternativas:
-
Sustitución
total o parcial de la carne de ternera por la carne de la pieza e hígado, del
cual recibe el nombre. Así podemos hacer relleno de ave o caza.
-
Sirve para
rellenos de Balotinas y Galantinas. Las balotinas rellenas de esta farsa y
bridadas después se asan. Las galantinas deshuesadas y rellenas se escalfan en
fondo y luego se prensan.
Farsa para
patés y terrinas.
Componentes:
- Hígado de ave 600 gr
- Tocino 300 gr
- Chalota 100 gr
- Brandy 1 dl
- Laurel 1 hoja
- Tomillo 1 ramita
- Sal y pimienta lo necesario
Fases:
-
Picar las
chalotas.
-
Cortar el
tocino en dados.
-
Limpiar el
hígado y escalopar.
-
Fondear el
tocino en un saute.
-
Añadir el
hígado y saltear a fuego vivo.
-
Añadir las
chalotas y rehogar sin que tome color.
-
Añadir el
laurel y el tomillo.
-
Flambear con
el brandy.
-
Pasar la
farsa.
-
Trabajarla
en un recipiente de acero inoxidable sobre hielo.
Esta farsa
se utiliza para hacer patés en costra, para terrinas y para canapés, y para
rellenos.
Farsa
muselina de ternera, de ave, pescado o crustáceos.
Componentes:
- Carne de ave, ternera, pescado o
crustáceo 1
kg
- Claras de huevo 2
a 4 unid
- Nata líquida 8
dl – 1,2 l
- Sal, pimienta blanca y nuez
moscada necesaria
Fases:
-
Todos los
elementos con los que vamos a trabajar deberán estar fríos.
-
Limpiar
perfectamente la carne de cualquiera de los elementos que vamos a utilizar.
-
Cortar la
carne en trocito y dejarla en la cámara unos minutos para que se enfríe.
-
Picar
finamente la carne con la turmix y añadir las claras.
-
Pasar por un
tamiz.
-
Poner la
farsa en un barreño puesto sobre otro más grande con hielo.
-
Trabajar la
farsa e ir añadiendo poco a poco la nata, removiendo.
-
Conservar
tapada con film en la cámara.
Aplicaciones:
Para rellenar jamoncitos de ave,
popietas de ternera, de pescado, para la realización de terrinas de pescado,
para la elaboración de mousses y para la elaboración de quenefas.
Alternativas:
-
La
utilización de claras de huevo varía según la calidad y el grado de frescor de
los géneros; la de pescado y ave no siempre necesita de la adición de claras.
-
La cantidad
de crema puede variar dependiendo de la consistencia que queramos conseguir.
-
Para que la
farsa sea más esponjosa podemos añadir la nata en dos tiempos. Primero la
montamos con un poco más de la mitad y la dejamos reposar en la cámara sobre un
recipiente con hielo unas horas. Segundo añadimos el resto de la nata.
Fondos de
cocina varios. (El Práctico).
Appareil. Para cromesquis y croquettes. Ver relevés.
Appareil
Maintenon. 2/3 partes
de Bechamel soubisée, 1/3 de pure de champignons ligado con algunas yemas.
Agregar champignons cortados.
Appareil
Montglase. Juliana de
lengua, foie-gras, champignons y trufas, ligado con salsa Madera reducida.
Enfríar sobre placa untada de manteca.
Appareil. Para patatas Duquesa, Dauphine y Marquesa.
Ver legumbres.
Americano. Especial para los pescados a la Americana.
Machacar al mortero desperdicios de langosta. Erogarlo con aceite, manteca,
cebolla, ajo, escaluñas, algunos tomates frescos, laurel y tomillo; mojarlo con
un vaso de vino blanco y un poco de fumet de pescado. Pasar al cedazo. Hacer un
fondo con manteca, cebolla, escaluñas, un poco de ajo y tomate fresco, todo
picado muy fino. Sazonar y agregar un bouquet y el puré obtenido de la
langosta. Reducir un poco y ligarla con un poco de fécula. Perfumar con n vaso
de coñac. Guardar al frío.
Arroz. Para rellenos. Marcar el arroz con manteca y
un poco de cebolla picada. Mojarlo con caldo blanco el doble de su volumen.
Cocinarlo 10 minutos. Luego ligarlo, sea con crema, glace de viande, foie-gras,
etc.
Bordures. Las borduras se hacen de farce, de pasta
blanca, de pasta a tallarines, de puré Duquesa, de costrones de pan fritos,
etc. Las borduras hechas de farce son decoradas con detalles de legumbres,
trufas, etc. Las de pasta blanca y de pasta a tallarines una vez cortadas las
piezas se ponen a secar y luego se montan alrededor de la fuente, sostenidas o
apegadas con clara de huevo o con glace de viande, según la clase.
Coulis de
cangrejos de río. Salsa Nantua
más espesa.
Coulis de
tomate. Salsa de tomate más espesa.
Croûtons. Se hacen de miga de pan cortados de
diferentes formas: tostados al horno, pasados a la manteca, etc.
Duxelles
seca. (a). Cebolla, escaluñas y algún
ajo dorado a la manteca; añadir champignons, todo picado fino y un poco de
pasta de tomate, bouquet, cocinar y guardar al frío.
(b). Marcar
de igual forma, agregar jamón y hongos remojados picados, pasta de tomate, nuez
y pimienta, y también el agua de los hongos pasada y sin tiera; cocinar a
reducción regular. Guardar al frío.
Duxelles
para legumbres. Reducción
de vino blanco con duxelle seca. Añadir Demi-glace, miga de pan y p0erejil.
Cocinar a consistencia.
Duxelles
para guarniciones. ½ duxelle
seca. ½ farce à quenelles.
Esencias. Jugos del ingrediente reducido al grado
sabórico consistente.
Farce a la
americana. Cebolla
picada rehogada con manteca, dados de tocino ahumado. Añadir miga de pan
fresco. Sazonar, sal pimienta y perejil.
Farce de
caza. ½ carne cerdo; ¼ carne de caza; ¼
tocino gordo. Pasar a la máquina; sazonar.
Farce à
gratin para costrones. Sazonar
hígados de ave, sal, pimienta y especias compuestas, saltearlos en fuego vivo
con un poco de tocino gordo; machacar al mortero, pasar por el cedazo fino.
Farce á
gratin para caza. La misma
farce que para el pâté caliente; añadir: carne de caza, especias, tomillo y
laurel.
Farce à
gratin para pâtés. Hígados de
ave y tocino gordo. Saltear. Sazonar: sal, pimienta, especias. Machacar y pasar
por el cedazo.
Farce para
galantines, pâtés, terrines. Poner a
desangrar dentro de agua fría 500 gr de ternera sin nervios ni grasa, 500 gr de
cerdo y 800 gr de tocino gordo. Dejarlo en el agua dentro de cámara frigorífica
24 horas o más cambiándole el agua dos veces para blanquear las carnes. Escurrir
y pasarlo todo por la máquina 3 veces hasta obtener una farce bien fina y por
último machacarla al mortero, recogerla y colocarla dentro de un utensilio
cualquiera. Añadir 3 claras de huevo, ½ litro de crema de leche, 50 gr de sal,
especias y un vaso de coñac. Hacer bien la mezcla.
Farce à
quenelles de ternera, ave, caza, pescado, etc. Pasar a la máquina y machacar al mortero la
carne cruda sin nervios ni grasa. pasar al cedazo. Sazonar de buen gusto y
montarla con crema sobre hielo. Para la farce de pescado agregar algunas claras
de huevo.
Farce de
cerdo. ½ de carne de cerdo, ½ tocino
gordo. Pasar a la máquina y machacarla al mortero. Sazonar de buen gusto. Vaso
de coñac.
Farce a la
Rouennaise. Rehogar
125 gr de tocino gordo, fresco, con dos cucharadas de cebolla y escaluñas;
añadir: 250 gr de hígados de pato cortados, perejil, sal especias, sacar del
fuego para tener los hígados sanguinosos. Dejar enfriar un poco. Machacar y
pasar al cedazo.
Farce a la
inglesa para patos, lechón, pavos etc. Cocinar al
horno 1 kilo de cebollas y dejarlas enfriar; picarlas finas y mezclarlas con
400 gr de miga de pan remojada con leche y exprimida; 400 gr de grasa de
riñonada de buey picada. Sazonar: sal, pimienta moscada, 100 gr de salvia
blanqueada y picada, 2 huevos. Mezclar bien.
Farce de
pescado. Lomos de pescado machacados al
mortero. Sazonar y pasar al cedazo; agregar algunas claras de huevo. Montar a
la crema sobre hielo.
Fondos de
fuentes, tampones costradas. Se hacen de
miga de pan de sémola y de arroz. Los de pan se cortan según la necesidad de su
empleo y de formas distintas; se hacen tostar al horno o fritos a la gran
fritura, se sujetan con glace o con repère. Los de sémola se hacen con sémola
cocida al agua, bastante espesa; se pone a enfriar sobre placas y se cortan a
medida y forma, o se moldean. Los de arroz: se blanquea el arroz 2 minutos, se
escurre y se lava; se vuelve a poner a cocinar hasta que esté bien recocido. Se
colocan sobre placas y se dejan enfriar; se cortan a medida o se moldean.
Fondue de
tomates o tomates concassées. En ½ aceite,
½ manteca, algún grano de ajo, hojas de laurel, rehogar un poco, añadir tomates
sin piel ni semilla, cortados grueso, sal, un poco de azúcar y pimienta; dejar
cocinar hasta obtener las evaporación del agua. Debe quedar algo espesa.
Godiveau. Machacar carne de ternera sin grasa y sin
nervios y el doble de su volumen de grasa de riñonada de buey. Esta operación
se hace por separado. Luego se junta. Añadir algunos huevos, uno a la vez.
Sazonar y pasarlo por el cedazo; ponerlo dentro de una terrina y dejarlo
descansar dos horas. Luego trabajarlo
sobre el hielo, añadiendo algunos pedacitos de hielo y crema de leche. Hacer el
ensayo, formar las quenelles y ponerlas a pocher con agua dentro de un sautoir
o de una placa.
Godiveau
Lyonnais. ½ carne de pescado (sollo), ¼
parte de grasa de riñonada de buey; ¼ de tuétano (caracú); machacar al mortero
con ¼ de panada; fórmula (c). Sazonar, y algunas claras de huevo. Pasar al
cedazo. Formar las quenelles y pocher.
Kache de
Sarraceno. Pasta
compacta hecha conharina de trigo negro llamada también alforfón y de grano
menudo. Se pone a cocinar dentro de una cacerola rusa barnizada con agua y sal;
dejarla cocinar dos horas al horno. Quitar la cáscara y agregar un poco de manteca,
trabajarla con una espátula. Echarla sobre una placa untada, colocar otra placa
encima para prensarla y dejarla enfriar. Espesor: 1 centímetro. Cortarla con un
molde de 5 cm de diámetro y freír de los dos lados con manteca. Servir en
rabaneras.
Kache de
sémola para el coulibiac. Sobre una
placa poner ½ kilo de sémola gruesa llamada Smoloenski Kroupa. Batir dos huevos
frescos y mezclarlos a la sémola para que ésta quede humedecida; ponerla a la
estufa a secar; pasarla por un cedazo. Poner a hervir 2 litros de leche con 200
gr de manteca, sal, echar la sémola y dejarla cocinar bien; luego colocar la
pasta dentro de una cacerola de plata; tenerla al horno. Servir tal cual y una
salsera de manteca fundida.
Matignon. Paisana compuesta de zanahorias, cebolla,
apio, jamón crudo, laurel, tomillo, estofado a la manteca y perfumado al vino
Madera.
Mirepoix. Cuadraditos de zanahoria, cebolla, jamón
crudo, apio, tomillo y laurel; erogado a la manteca.
Mirepoix a
la Bordelesa. Brunoise
fina de zanahorias, cebollas, perejil, polvo de laurel y tomillo; rehogado a la
manteca.
Panades.(a). Miga de pan remojado con leche.
Trabajarlo con una espátula sobre el fuego. Sazonar. Dejarla enfriar antes de
emplearla.
(b). Operar
igual para la pasta a “Bomba” sin adición de huevos. Enfriar antes de
emplearla.
(c). Harina
mezclada con yemas y manteca fundida, sal, pimienta, nuez. Mojar con leche
hirviendo. Cocinar unos 10 minutos. Enfriar.
(d). Arroz
lavado y puesto a cocinar con caldo, mojado tres veces más de su volumen, añadir
manteca. Cocinar una hora. Trabajarla para obtener una pasta lisa y fina.
Enfriar.
(e). Patatas
cortadas, cocinadas con leche. Pasar. Sazonar: sal, pimienta, nuez. Reducir y
trabajarla. Añadir un poco de manteca. Emplearla tibia.
Recetas de
farce de panadas: añadir ½ panada al elemento de base.
Provenzal. (a). Salsa Bechamel muy reducida y perfumada
al ajo, ligada con yemas.
(b). Ajo y
perejil, picado fino.
Pasta a
bomba (Pâte à Chou). Para
preparaciones de cocina: ½ litro de agua o leche, 100 gr de amanteca, 5 gr de
sal. Hacerlo hervir y añadir, fuera del fuego, 325 gr de harina pasada. Mezclar
y trabajarla sobre el fuego 3 minutos, luego agregar 6 ó 7 huevos enteros, de
uno en uno, hasta terminar trabajándola con una espátula. Esta pasta es
especial para las patatas Dauphine y para los Gnokis à la Parisienne, etc.
Pasta para
freír. (A). Especial para Cromeskis y
sesos. En terrina; hacer una pasta con 250 gr de harina, sal, un poco de aceite
y unos 4 dl de agua tibia. Añadir al momento de servirse de ella 6 claras
montadas.
(B).
Especial para legumbres. 250 gr de harina, sal, 50 gr de manteca fundida, dos
huevos, y la cantidad de agua necesaria para obtener una pasta regular de
espesa. Prepararla una hora antes.
Twaroque
para piroguis. 200 gr de
queso blando (leche cortada), bien escurrido. Colocarlo dentro de una terrina.
Trabajarlo con una espátula para obtener una pasta fina. Añadir: 200 gr de
manteca, un huevo, sal y pimienta. Mezclar bien.
Velouté de
ternera o de ave. Roux blanco
a la manteca diluido con fondo blanco de ternera o de ave. Lisarla con el
batidor. Bouquet y recortes de champignons frescos; dejar cocer dos horas y
media. Pasar a la estameña y si hay que guardarla, revolverla de vez en cuando
hasta estar completamente fría.
Velouté de pescado.
Su preparación es la misma que la
anterior. Reemplazar el fondo por un buen fumet de pescado. Especial para
algunas salsas combinadas para pescados.
·
Cuadros
explicativos.
·
¡No
te olvides!
ü Los fondos son la base de una cocina
excelente.
ü Los fondos se elaboran con los
elementos que conforman su nombre y la guarnición aromática.
ü Un buen fondo tiene que tener 4 ó 5
partes de líquido por una parte de sólido.
ü Lava siempre muy bien las hortalizas
que utilices para la elaboración de un fondo.
ü Lava y blanquea los huesos, carcasas
o espinas que vayas a utilizar en un fondo. Quedará mucho más limpio y tendrás
que espumar menos veces durante su elaboración.
ü La cocción de los fondos siempre debe
ser suave para que se enturbie lo menos posible.
ü Nunca sazones un fondo hasta el
final. La reducción lo podrá dejar salado.
ü Los fondos hay que colarlos,
espumarlos, desgrasarlos y mantenerlos en frío.
ü En los fondos oscuros y en los fumets
rojos hay que tostar bien la bresa de verduras y los huesos, desperdicios,
cabezas y espinas que utilicemos. Evita que se queme, porque los caldos
resultarán amargos.
ü Los consomés deben estar
perfectamente clarificados. Para ello, la cocción debe ser extremadamente suave
y el filtrado se debe hacer por estameña o superbag.
ü El uso de hierbas aromáticas y
especias en la elaboración de fondos y caldos debe ser cauteloso. Muchas veces,
no sabemos cuál será el fin último del fondo.
ü La glace es un concentrado producto
de la reducción progresiva de un fondo.
ü La glace se puede conservar durante
bastante tiempo. La debemos porcionar y envasar al vacío o filmada. Aguanta muy
bien la congelación.
ü Las gelatinas pueden ser naturales o
elaboradas.
ü Las ligazones pueden ser de origen
animal o vegetal.
ü Las ligazones de origen animal
(huevos, sangre, etc) no debe cocer. Se cortan.
ü Las mantequillas compuestas se podrán
realizar en frío o en caliente y a partir de géneros crudos o cocinados.
ü Las marinadas pueden ser crudas y
cocinadas.
ü Los caldos cortos llevan un ácido:
vinagre, zumo de limón o vino.
ü El caldo blanco se utiliza para la
cocción de hortalizas que son de fácil oxidación.
ü Los escabeches pueden variar mucho de
sabor e intensidad dependiendo de los aceites, vinagres, hortalizas, especias y
hierbas aromáticas que utilicemos.
ü El adobo es un recurso muy importante
para la conservación y aromatización de diferentes géneros.
ü Las salmueras pueden ser secas o
líquidas.
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